Futuras ZBE catalanas: el Govern augura un acuerdo con los alcaldes críticos del área de Barcelona

El Govern de la Generalitat de Catalunya augura un acuerdo a corto plazo con los alcaldes de la región metropolitana de Barcelona, específicamente los de la asociación Arc Metropolità (Terrassa, Sabadell o Mataró, por ejemplo), que se han mostrado críticos con el proyecto del nuevo decreto catalán de Zonas de Bajas Emisiones (ZBE).

Lo ha anunciado así el 'conseller' d'Acció Climàtica, David Mascort (ERC), en la sesión ordinaria de este martes 20 de febrero en el Parlament de Catalunya, donde además ha confirmado que el Departament d'Acció Climàtica aceptará "especialmente" las alegaciones formuladas por el Área Metropolitana de Barcelona (AMB), cuyo pionero modelo de ZBE ha elogiado.

"No tenemos ninguna duda de que nos pondremos de acuerdo con los municipios del Arc Metropolitá pese a sus reticencias", ha afirmado Mascort. El responsable de la cartera mediambiental del ejecutivo catalán se ha referido así a las reiteradas críticas protagonizadas por alcaldes de grandes ciudades del Vallès, que en declaraciones a EL PERIÓDICO han llegado a tildar el proyecto normativo de "despropósito", además de solicitar directamente su "retirada".

Lluvia de alegaciones de grandes ciudades del área de BCN contra la norma catalana de Zonas de Bajas Emisiones: "Es un despropósito"

Las hasta la fecha inéditas restricciones de circulación a los vehículos con 'etiqueta B' (amarilla) han sido el principal foco de controversia: mientras que el Departament d'Acció Climàtica -y el AMB como administración supramunicipal- defienden que deben empezar "antes del 1 de enero del 2026" (para vehículos diésel 'Euro 4', modelos entre 2006 y 2013) y aplicarse a todos los 'etiqueta B' "antes del 1 de enero del 2028", las ciudades del Arc Metropolità (además de otras como Badalona) han solicitado flexibilizar la regulación, por ejemplo retrasando los plazos a partir de los cuales compute la limitación de circulación.

Según un cálculo de este diario a partir de los últimos datos oficiales (2022) de la Dirección General de Tráfico (DGT), las ciudades que potencialmente tendrían mayor proporción de vehículos (sumando 'sin etiqueta' y 'etiqueta B' afectados) afectados en caso de que el actual proyecto prosperase, coinciden en su mayoría con las ciudades críticas, a excepción de Manresa: Vilanova i la Geltrú, Terrassa, Granollers, Mataró y Sabadell, todas ellas integrantes del Arc Metropolità.

Elogios al modelo del AMB

Algo que el 'conseller' ha enfatizado son los elogios del pionero modelo de ZBE impulsado por el AMB y el Ayuntamiento de Barcelona en las rondas de la capital catalana, el cual "se ha demostrado que funciona", ha afirmado Mascort, quien ha puesto en valor que "por primera vez, en 2023 Barcelona ha cumplido la directiva europea contra la contaminación en todas sus estaciones".

En este sentido, desde el AMB sitúan en un 50% la reducción de partículas contaminantes de dióxido de nitrógeno (NO₂) en las rondas de Barcelona desde que la ZBE se puso en marcha en 2020, mientras que el Ayuntamiento de Barcelona habla de un 70% de reducción de circulación de coches contaminates (sin etiqueta y 'etiqueta B') desde el 2017.

La ZBE de Barcelona ha reducido un 70% la circulación de los coches más contaminantes

Pese a la sintonía entre el Govern y el AMB en cuanto a las medidas anticontaminación, la administración metropolitana también formalizó alegaciones con algunas críticas de tipo técnico. Por ejemplo, el AMB pidió que el territorio de las 36 ciudades que la conforman pueda ser considerado como una ZBE única y, atendiendo a la singularidad metropolitana, todo el área -además del de las ciudades- pueda computar para el cálculo de la superficie mínima de las ZBE, que el decreto sitúa en un 25% del suelo urbano residencial de cada ciudad.

Además, el AMB también solicitó al Govern que tenga en cuenta e implemente el Registre metropolità de vehicles estrangers i altres vehicles autoritzats, ya en funcionamiento, para la inscripción de vehículos cuya entrada se prevé excepcionalmente aun sin cumplir las condiciones ambientales. En este sentido, la administración metropolitana se mostró incluso crítica con la laxitud del decreto del Govern, por ejemplo permitiendo a ciudadanos residentes la excepción de circular por las ZBE durante 52 días durante el año posterior a la entrada en vigor del decreto.