El PSC ofrece apoyo al Govern para compensar vía presupuestos los sectores castigados por la sequía

Tras meses poniendo el foco en lo que el Govern debería haber hecho en materia de infraestructuras para estar preparado para afrontar un escenario de sequía sin parangón y lamentando su inacción, una vez declarada la emergencia, el PSC pone ahora el acento en atender a la urgencia y redobla sus declaraciones ofreciendo "colaboración" a Pere Aragonès. Así se lo trasladó en una llamada telefónica Salvador Illa al president el jueves pasado y así lo mantienen en un momento en que la gestión de la escasez de agua se entremezcla con la negociación de los presupuestos. Hasta tal punto, que los socialistas tienden la mano para compensar a los sectores afectados por las restricciones vía modificación de las cuentas de 2023.

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El bloqueo de la amnistía en el Congreso ha trastocado las expectativas tanto del Govern como de la oposición en Catalunya, con una larga lista de episodios por dirimir. De momento, Aragonès ya ha demorado la mesa de partidos para abordar el acuerdo de claridad, decisión que el PSC celebra porque, a su juicio, si hay que sentarse a hablar de algo es de la sequía, que es "lo que preocupa" a la ciudadanía. Un clima de sintonía a la que se suma el acuerdo para pagar a medias el coste de traer agua en barco desde Sagunt y para que el Estado se haga cargo del montante de las dos nuevas desalinizadoras de la Tordera y el Foix.

"Al lado" del Govern

Los socialistas catalanes están a la espera de reunirse esta semana con el Executiu para hacer balance de qué se ha cumplido y qué no del pacto presupuestario de 2023 y encauzar a partir de entonces la negociación de 2024. Sin embargo, el partido de Illa considera que la situación es lo suficientemente grave como para actuar por la vía rápida si hay empresas que, debido a las restricciones, se ven obligadas a disminuir su producción y a aplicar despidos temporales de plantilla o si hay que dar un espaldarazo al sector agroalimentario. "Más allá de la negociación de 2024, el Govern nos tendrá a su lado para tomar medidas y hacer modificaciones presupuestarias para ayudar a los sectores afectados", ha defendido la diputada Sílvia Paneque, encargada de liderar esta carpeta en el Parlament, que ha celebrado que el Executiu esté en una senda de "colaboración entre instituciones".

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El PSC no comparte la filosofía del Executiu de aplicar un recorte lineal del 25% del consumo de agua en los sectores industriales. "Es injusto para las empresas que han hecho los deberes y tienen una huella hídrica muy acotada", ha asegurado Paneque, que ha vuelto a insistir, preguntada sobre si habría que tomar más medidas en el ámbito del consumo del turismo, en que su partido no es partidario de "confrontar sectores".

Los Comuns exigen límites al turismo

Los Comuns, por contra, continúan exigiendo al Govern que meta mano en el sector del turismo para que se implique en la reducción del consumo de agua en plena emergencia por la sequía. Además de volver a reclamar que se descarte el Hard Rock y el proyecto de ampliación del aeropuerto de El Prat, han pedido al president Pere Aragonès que restrinja los litros de agua que pueden consumir los turistas en lugar de dejar en manos de los ayuntamientos la capacidad para decretar restricciones en este ámbito. El PSC no solo no avala esta reclamación, sino que sostiene que la sequía no debería ser "excusa" para frenar proyectos como el Hard Rock, que consideran que podría haberse impulsado si se hubiera invertido en los últimos años en tener un sistema hídrico resiliente.

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"El turismo no es de azúcar, no está exento de todo y no debe de tener barra libre mientras se pide a la agricultura y la ganadería que reduzcan el agua entre un 50% y un 80%. Hay que poner límites", ha afirmado el portavoz de Catalunya en Comú, Joan Mena, que ha concretado que hay que considerar el turismo como un sector "específico" a la hora de aprobar medidas que sean "equitativas" entre vecinos y turistas. Para los Comuns, aunque el Govern no tiene la culpa de que no llueva, sí la tiene del hecho de que Catalunya "no esté preparada" para hacer frente a esta sequía y ha defendido que medidas como traer agua en barcos de Sagunt tiene que ser "extraordinaria".

"Vamos tarde con las medidas contra la sequía porque no se ha querido asumir antes los costes públicos que tiene. Falta liderazgo y hay inacción en el Govern", ha subrayado exigiendo responsabilidad tanto a ERC como al PSC. De hecho, a los socialistas y en clave barcelonesa, Mena ha reprochado al alcalde Jaume Collbonique haya congelado la política de retirada de licencias turísticas que instauró el gobierno de Ada Colau y sea "débil" frente a los lobbies de la ciudad. Sobre las negociaciones del PSC para el gobierno municipal, los Comuns consideran que nada se mueve porque Collboni aún no tiene claro "con quién quiere gobernar" ni cuál es su "modelo de ciudad".