¿Qué hace un viceconseller? Las claves del nuevo rol de Sergi Sabrià como ariete del Govern

Cuando este miércoles acuda a trabajar, Sergi Sabrià lo hará en su mismo despacho de siempre situado en una de las alas del Pati dels Tarongers de la Generalitat. Sin embargo, ya no ejercerá de director de la Oficina de Estratègia i Comunicació del president, sino como flamante viceconseller de Estratègia i Comunicació del Govern. La decisión de Pere Aragonès de crear un viceconseller es el cambio que más ha sorprendido en la remodelación del Govern que ha anunciado este martes. ¿De dónde sale esta denominación?

La figura del viceconseller está regulada por la ley de la presidencia de la Generalitat. En su artículo 24 dice que los consellers que lo deseen podrán asignarse un "comisionado" para encargarle una tarea de un "ámbito de actuación específico". Una suerte de comodín para desarrollar una misión concreta y con el reconocimiento de ser un "alto cargo" de la Generalitat. Si el comisionado en cuestión está adscrito al departamento de Presidència, como el caso de Sabrià, es cuando podrán denominarse "viceconsellers".

A la práctica, Sabrià llevará a cabo la misma tarea que hasta ahora: ser el brazo ejecutor del president para que funcione el engranaje de la Generalitat. "A nivel estratégico, de relato y de coordinación es la figura clave del Govern. Es quien hace que las cosas pasen", explica una voz de la Generalitat. "Es la mano derecha del president, el de los proyectos estratégicos como el aeropuerto, Rodalies o el diálogo", explica otra. Otras voces lo sitúan con más poder que los consellers, aunque nunca haya tenido el rango. Lo que está claro, es su ascendencia directa en el president.

Pese a no cambiar de despacho, ni el núcleo de sus funciones, el nuevo cargo de Sabrià sí conllevará tres matices a tener en cuenta. Primero, el estatus de 'viceconseller' supone un reconocimiento del president de cara al público. En segundo lugar, la ley le permitirá a partir de ahora asistir cuando se le requiera a las reuniones del Govern, es decir, conocer de primera mano e intervenir directamente en las deliberaciones del president y de los consellers.

Por último, Aragonès también prevé darle más relevancia en los medios de comunicación. Esa es una de las cuestiones en las que hacen más énfasis desde el Palau de la Generalitat. Con Sabrià de viceconseller quieren sumar "otra voz" reconocible en los medios aparte de la del president o la de la portavoz, Patrícia Plaja. Y además que, en contraposición a un president más "institucional", pueda posicionarse de forma más "contundente".

Los precedentes

Sabrià no será el primer viceconseller de la Generalitat. Entre 2018 y el 2021 Pau Villòria ejerció de viceconseller por el Desplegament de l'Autogovern. Su misión fue la de listar y analizar todos los agravios por la aplicación del artículo 155 de la Constitución que suspendió la autonomía catalana. Entre 2008 y 2011 Roser Clavell ejerció de viceconsellera de Afers Exteriors. Ese fue un movimiento del entonces vicepresident Josep-Lluís Carod-Rovira para tratar de dar mayor presencia a la política exterior. Pero si Villòria y Clavell pasaron sin mucha notoriedad, con Sabrià se intentará todo lo contrario.

Una persona de partido

Antes de llegar a la 'cocina' del Govern, Sabrià se forjó en los 'fogones' del partido en tareas de comunicación, estrategia y campañas electorales. Él pilotó la campaña más complicada, cuando en 2017 ERC tuvo que gestionar la decepción de quedar por detrás de Junts, pero también la campaña más celebrada, cuando en 2021 el partido pudo liderar la Generalitat ocho décadas después. Eso le catapultó al Govern.

Por el camino ha desarrollado otras responsabilidades. Ya tuvo cargos intermedios durante el tripartito; fue alcalde de su municipio (2009-2011), Palafrugell; diputado durante casi una década, líder del grupo parlamentario y portavoz de la formación. Un licenciado en Ciencias Políticas que ascendió en el partido de la mano de Junqueras y que ahora lo hace en el Govern de la mano de Aragonès.

La novedad de Vilagrà

El otro cambio del día ha sido la designación de la consellera de Presidència, Laura Vilagrà, como nueva vicepresidenta. Este cargo es más reconocible y tiene más precedentes cercanos. Sin embargo, también incluye una novedad. El cargo de vicepresidente siempre era visto como un contrapeso dentro de un ejecutivo de coalición. Por poner un ejemplo, si la presidencia era para CDC -Artur Mas-, la vicepresidencia lo era para Unió -Joan Ortega-. El último antecedente era de Aragonès (ERC) president, y Jordi Puigneró (Junts) vicepresident. Ahora, Vilagrà será la primera vicepresidenta en un gobierno monocolor. Un reconocimiento a la otra mano derecha del president.

Suscríbete para seguir leyendo