Sánchez y Aragonès se citan hoy para reactivar la mesa de diálogo y avanzar en inversiones

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el de la Generalitat, Pere Aragonès, se reunirán este jueves a las 12.00 horas en el Palau de la Generalitat para inaugurar un nuevo ciclo de relaciones entre los dos gobiernos. El PSOE y ERC ya llevan cuatro años dialogando y pactando con asiduidad, pero hoy es el primer encuentro desde que Sánchez fue investido en noviembre por segunda vez consecutiva gracias a la colaboración de ERC. Las dos partes, por lo tanto, reforzarán el ciclo pactista abierto en 2019. Un ciclo que hasta ahora en ambos lados dan por bueno: la Generalitat ha obtenido avances en la desjudicialización del 'procés' -indultos, derogación de la sedición y la tramitación de la amnistía-, mientras que el Gobierno ha podido contar con los votos de Esquerra en el Congreso para gobernar con una cierta estabilidad.

La Generalitat quiere que la de este jueves sea una reunión de "trabajo" y no protocolaria. "Es una reunión para avanzar, no es solo un formalismo", defienden desde la plaza Sant Jaume. Es la forma diplomática de decir que necesitan que de la cita salgan concreciones del pacto de investidura que ERC firmó con el PSOE. Los republicanos ya hace tiempo que perdieron el miedo a pactar con los socialistas, pero necesitan exhibir los frutos de estos acuerdos para reafirmarse ante los ciudadanos. A grandes rasgos el pacto de investidura tenía dos patas: la del 'procés' y las de las inversiones y financiación. De la primera pata, la Generalitat espera la reactivación de la mesa de diálogo entre la Generalitat y el Estado. Una mesa a la que Aragonès quiere llevar su propuesta de referéndum pactado aunque que cuente con la oposición frontal del PSOE.

La otra pata, las de las inversiones, tiene muchas más aristas. El Govern, por ejemplo, quiere cerrar cuanto antes el dinero que Sánchez esté dispuesto a poner en 2024 para concretar el traspaso de Rodalies. También quiere mejoras en las transferencias a la Generalitat, de la misma forma que quiere poner fecha ya a la comisión entre gobiernos para proponer un nuevo modelo de financiación "singular" para Catalunya. De hecho, el Executiu ya ha obtenido un primer rédito del pacto: la transferencia de 1.600 millones de euros para financiar los Mossos d'Esquadra hasta el 2030. Según ha avanzado EL PERIÓDICO, el primer pago de 93 millones será en 2024. "No es casual que haya pasado un día antes de la reunión", señalan desde la Generalitat.

Visita conjunta al supercomputador

La cita, que vendrá precedida de una visita al Centro de Supercomputación de Barcelona, resulta más cómoda para Sánchez que la que tiene previsto mantener, en fecha y lugar aún por determinar, con Carles Puigdemont. Las relaciones con Junts son ahora igual de importantes que con ERC, pero con los republicanos los lazos del líder socialista son mucho más estrechos tras la pasada legislatura, en la que el partido de Oriol Junqueras y Aragonès fue decisivo en gran parte de las iniciativas del Gobierno. El esquema tiene que repetirse en este nuevo mandato, más incluso que en el anterior, y de todas las reuniones que mantendrá en los próximos meses con los distintos presidentes autonómicos, Sánchez ha decidido que el primero sea Aragonès.

El encuentro en el Palau, dijo el martes la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, "da respuesta a una normalidad institucional y democrática". Allí, continuó, se abordarán "temas que importan e interesan a los ciudadanos". Pero mientras Aragonès explicitó este miércoles en el Parlament los asuntos que quiere tratar con Sánchez, el Gobierno central guarda silencio sobre el contenido.

“Esta es una muestra más de la apuesta del Gobierno por el diálogo”, señalan fuentes de la Moncloa, que no descartan que del encuentro pueda salir la fecha para la primera reunión de la nueva mesa de diálogo entre el Gobierno y la Generalitat, uno de los logros que obtuvo ERC en la pasada legislatura y que se ha reeditado en esta. “El Gobierno acude al encuentro con ánimo constructivo y con ganas de seguir trabajando para llegar a acuerdos que mejoren la vida del conjunto de los ciudadanos -concluyen los colaboradores del presidente-. La colaboración institucional a todos los niveles es necesaria para optimizar recursos, para un buen funcionamiento de los servicios públicos y para atender de la mejor manera las necesidades de los ciudadanos”.

Amnistía y presupuestos

El encuentro tendrá dos temas más encima de la mesa, aunque difícilmente luego haya explicaciones extensas sobre la materia, ya que a las dos partes les interesa mantener discreción. De hecho, son los dos temas más candentes para los dos presidentes. El primero, las posibles enmiendas a la ley de amnistía. ERC quiere cambiar el redactado relativo a los delitos de terrorismo y el PSOE solo se abre a hacer modificaciones "técnicas". Habrá que ver si hay un término medio posible.

Por último, los dos presidentes quieren aprobar sus respectivos presupuestos de 2024. Los votos socialistas son decisivos para Aragonès en el Parlament, mientras que los de ERC también lo son para Sánchez en el Congreso. Todo lleva a pensar en un intercambio de favores, aunque las dos partes, por ahora lo niegan. El problema para los dos presidentes es que no les vale con un apoyo mutuo y deben buscar a otros partidos.