Debate de política general

El PSC deberá pronunciarse sobre la amnistía en el primer examen al Govern monocolor de ERC

ERC exige a Sánchez hablar de referéndum tras asegurar que ya intercambian documentos sobre la amnistía

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Alícia Romero y Salvador Illa (PSC) en una imagen de archivo.

Alícia Romero y Salvador Illa (PSC) en una imagen de archivo. / Bernat Vilaró / ACN

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Si el debate de política general del año pasado estuvo marcado por la batalla entre ERC y Junts y acabó siendo la chispa definitiva para la ruptura del Govern, el de este año estará marcado por las negociaciones en Madrid y la posible amnistía a los procesados y condenados por el 'procés'. La coincidencia con la investidura previsiblemente fallida de Alberto Núñez Feijóo, pero sobretodo con el diálogo abierto entre el PSOE y el independentismo para que Pedro Sánchez consiga formar Gobierno, eclipsarán el examen anual del 'president' Pere Aragonès, el primero que afronta con una minoría de tan solo 33 diputados de 135. Será inevitable que quien pilota la Generalitat haga referencia a las condiciones para apoyar la investidura, de la misma manera que en la bancada de la oposición estará en el punto de mira el PSC, que deberá pronunciarse sobre la amnistía. Estos son los planes y los retos de los partidos:

Equilibrar entre la exigencia y la mano tendida

El PSC afronta el debate tras un ciclo electoral de éxito tanto en las municipales como en las generales. Sin embargo, Salvador Illa está abocado a contemporizar y a buscar el equilibrio entre la exigencia y la mano tendida en asuntos como los presupuestos de 2024 en un contexto en el que Sánchez precisa de los votos de ERC y de Junts para ser reelegido. Los socialistas son conscientes de que estarán bajo lupa y que las condiciones que ponen los independentistas son materia sensible, especialmente porque la votación de propuestas a favor de la amnistía el próximo viernes coincidirán con la segunda vuelta de la votación de la investidura de Feijóo.

La previsión de los socialistas es no apoyar textos en los que se reclame explícitamente la amnistía, palabra que se evita tanto desde el PSC como el PSOE. Su apuesta es seguir defendiendo conceptos como el diálogo, la "normalización" o, en todo caso, la desjudicialización, pero no ir más allá sobre una cuestión que, insisten, ya tiene un marco de negociación propio en Madrid. La consigna es no meterse en camisa de once varas en un momento especialmente delicado de alta presión desde la derecha y de compleja negociación con Carles Puigdemont. Así que su prioridad serán las propuestas que incidan en "mejorar las condiciones de vida" de los catalanes, como por ejemplo el refuerzo de la atención primaria, insistir de nuevo en la mejora de la Formación Profesional, el despliegue del 5G y el impulso de infraestructuras, como las pactadas en los presupuestos y las que son clave para hacer frente a la sequía.

Negociar para evitar una sangría de votaciones perdidas

Uno de los objetivos de ERC en este debate será tratar de minimizar la situación de minoría parlamentaria con la que el Govern se encuentra en la Cámara. Eso significa que el grupo republicano deberá arremangarse al máximo para negociar con la oposición cuantas más resoluciones mejor y así perder cuantas menos votaciones posibles. Fuentes del partido del 'president' visualizan una pinza entre el PSC y Junts para tratar de desacreditar la labor de Aragonès y defender que el paso de ERC por la Generalitat tiene que ser efímero para volver a la alternancia "sociovergente" que ha había en Catalunya hasta el 2021. Ante esta expectativa, los republicanos reivindicarán el trabajo hecho en estos ya más de dos años en plaza Sant Jaume con medidas sociales como la gratuidad del I-2, el último curso de las guarderías públicas. También presentaran resoluciones propias para defender el catalán y la necesidad de acabar con el déficit fiscal a través de una "ley de financiación singular" exclusiva para Catalunya. Los republicanos también quieren llevar a votación textos a favor de la amnistía y autodeterminación a través de una resolución que puedan suscribir otros partidos -desde la CUP al PSC pasando por Junts y los Comuns-, aunque asumen que será muy complicado.

Presionar al PSOE y evaluar a Aragonès

Junts encara el debate como una palanca de presión en su estrategia negociadora con el PSOE. Tanto es así que una de las resoluciones que someterá a votación en el Parlament tiene que ver directamente con la reclamación de la amnistía y el derecho a la autodeterminación. El partido independentista tratará de pactar este texto con ERC y la CUP. Sin embargo, la formación independentista también se guarda en la recámara una propuesta de defensa de la soberanía de Catalunya y la unilateralidad, si bien está a la espera de constatar que este texto tiene garantías de ser aprobado. También habrá una resolución sobre el uso del catalán en la UE como lengua oficial, cosa que demuestra que para Junts este debate servirá en buena medida como banco de pruebas y termómetro de las conversaciones con los socialistas.

Obviamente también habrá espacio para las tareas de oposición, tras la salida de de Junts del Govern el pasado año. En este sentido, el partido independentista presenta un texto basado en la idea de que el Ejecutivo de Aragonès es débil y carente de confianza política. El texto probablemente recordará la existencia de un 52% de voto independentista en los comicios del 2021. Aparte de estas cuestiones más políticas, Junts incidirá en cuestiones como la sequía, el traspaso de la red de Rodalies a la Generalitat o la ronda norte del Vallès, entre otras. Todo con la vista puesta también en el debate de investidura del líder del PP, que es el epicentro de las claves políticas actuales, admiten en el partido del 'expresident'.

Evitar rebajas en la amnistía

En pleno proceso interno de refundación, la CUP aprovechará el debate de política general para dejar clara su esencia. Por un lado, presionará a ERC y Junts a comprometerse con la propuesta de amnistía que el independentismo llevó -sin éxito- al Congreso en 2021 y que en su preámbulo reconocía el derecho a la autodeterminación de Catalunya y dejaba al margen los policías que actuaron contra el referéndum del 1-O. Su objetivo es que sean "coherentes" en la negociación y no rebajen expectativas. Además, también pedrirán derogar la ley aprobada por PSC, ERC, Junts y los Comuns para responder a la sentencia del 25% de castellano en las escuelas.

Pero más allá del 'procés', también dejarán clara su vertiente social. Así, pedirán recuperar y desplegar la ley catalana aprobada en 2020 -y tumbada por el TC- para limitar los alquileres y que la energética pública tenga capacidad de "generación, distribución y comercialización de electricidad". Unas propuestas que, según los anticapitalistas, son "de mínimos", pero que se abren a negociar con ERC, Junts y los Comuns para que salgan adelante.

Ejercer como ariete en materia social

Aunque son conscientes de que el voto de los independentistas es determinante para la continuidad del Gobierno de coalición, los Comuns consideran que se pueden permitir un discurso "exigente" con el Govern, de quien siguen diciendo que "no tiene rumbo" mientras su tiempo como 'president' "se está agotando". La presidenta de En Comú Podem en el Parlament, Jéssica Albiach, centrará su mensaje en advertir a Aragonès de que "ponerse las pilas" para cumplir con los presupuestos de 2023, así como pactar unas cuentas para 2024, son sus "últimas oportunidades" para que acabar la legislatura tenga "sentido".

Los Comuns tienen ya bien definidas las propuestas de resolución. Además de llevar a votación el rechazo a un gobierno de PP y de Vox, presentarán una para constatar "la falta de liderazgo e iniciativa legislativa" del Govern. También un texto en el que defenderán la amnistía, un pacto para una mejora del sistema de financiación y que se alcance un "pacto entre gobiernos" que sea votado por la ciudadanía para resolver el conflicto político. Entre sus reclamaciones habrá políticas concretas, como la consolidación de la rebaja del precio del transporte público y, en materia sanitaria y educativa, garantizar la presencia de una enfermera en las escuelas y replantear el cheque escolar, precisamente uno de los anuncios que ya tiene previsto hacer Aragonès y que los Comuns tachan de "fracaso".

Recuperar presencia

Ya sin voz en el Congreso, Ciutadans quiere aprovechar el debate de política general para hacerse un hueco y que su voz tenga también un espacio durante la investidura de Feijóo. Con este pretexto, fuentes de Cs avisan de que Carlos Carrizosa tendrá un "tono duro" contra el PSOE por las negociaciones con Junts y ERC y que intentará "erigirse como el líder de la oposición constitucionalista", papel que consideran que no ejerce Salvador Illa.

Ello irá acompañado de varias propuestas relacionadas con el 'procés', que irán desde un rechazo a la amnistía y a favor de bilingüismo, hasta una reforma constitucional que elimine la distinción entre las comunidades históricas -Catalunya, Euskadi y Galicia- y el resto y que aclare el reparto de competencias. Sin embargo, aseguran que también quieren ser "constructivos" y que están trabajando -incluso con el Govern- otras propuestas como, por ejemplo, una contra el bullying escolar.

Cargar contra el PSC

Tras un final de verano convulso dentro del PP catalán, y a pesar de la coincidencia con la investidura de Feijóo en el Congreso, Alejandro Fernández tendrá su propio discurso en el Parlament. Cada vez más alejado del líder de su partido, a quien acusa de haber "titubeado" con el independentismo, aprovechará el atril del Parlament para cargar con dureza contra ERC y Junts por estar preparando -a su juicio- la "segunda parte" del 'procés' y por hacerlo ahora con la complicidad del PSC, contra quién también irán dirigidas gran parte de las críticas.

Además, siguiendo la estela de los otros ayuntamientos y parlamentos autonómicos, los populares prevén presentar una propuesta de resolución contra la amnistía. También preparan otros textos, como por ejemplo, a favor de bajar los impuestos y la ampliación del aeropuerto, o contra la ocupación ilegal.

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