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Ciutadans acusa al independentismo de ser "rehén" de Sánchez y augura "un mal final" a Junts

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La portavoz de Ciutadans en el Parlament, Anna Grau

La portavoz de Ciutadans en el Parlament, Anna Grau / ACN

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La portavoz de Ciutadans en el Parlament, Anna Grau, considera que el independentismo es "rehén de Pedro Sánchez" porque "no pueden pactar con nadie más" que no sea él. En una entrevista con la agencia ACN, Grau asegura que ERC y especialmente Junts han entrado en "una insatisfacción crónica de la que es muy difícil salir". En este sentido, "augura un mal final" a la formación de Carles Puigdemont, porque "no habrá forma humana de satisfacer al electorado". En clave de política catalana, la diputada de Cs no prevé un adelanto electoral por parte de Pere Aragonès, a quien "el marco político le es hostil". Y envía un mensaje al PSC, de quien considera que le "haría más bien entenderse" con su formación "que con otra gente", citando el ejemplo de Santa Coloma de Gramenet.

A la espera de iniciar formalmente las conversaciones para la investidura de Pedro Sánchez, ERC y Junts ya han puesto sobre la mesa algunas de sus condiciones, como una ley de amnistía o un referéndum. En este contexto, Anna Grau alerta de que "el conjunto de partidos nacionalistas tiene un problema" que les ha abocado a "posiciones maximalistas" en la negociación. "Se han pasado de frenada, se han pasado de dosis, y debes pedir que tu electorado lo considere aceptable", asegura la portavoz de Cs, que mira especialmente hacia Junts. "Hoy en día ya se ha entrado en la dimensión desconocida, en una insatisfacción crónica de la que es muy difícil salir", remacha.

"Saben que, o salimos de esta situación de bloqueo, o son rehenes de Pedro Sánchez", avisa Anna Grau, quien critica que "los partidos independentistas no pueden pactar con nadie que no sea Pedro Sánchez". Ve "un Tinell a escala nacional", en referencia al pacto que dio lugar al primer tripartito (2003) y que descartaba cualquier acuerdo con el PP. En esta línea, la portavoz parlamentaria de Cs añade que "la única manera de anestesiarlo y justificarlo" ante sus votantes por parte del soberanismo es "pedir cosas cada vez más extremas".

Centrándose en la formación de Laura Borràs y Jordi Turull, Grau cree que no acabará bien: "Le auguro un mal final al tema de Junts, porque llegará un momento en que no habrá forma humana de satisfacer al electorado". Y añade: "La mayor satisfacción que puede ofrecer Puigdemont a su electorado es la de reventar una investidura. Ya ni siquiera conseguir cosas a cambio". La diputada en el Parlament lo contrapone con la política de los años 90. En este sentido, recuerda cómo Jordi Pujol negoció con José Maria Aznar la supresión del servicio militar obligatorio. "Puede parecer una tontería, pero los millones de españoles que tenían que hacer la 'mili' lo consideraron una conquista importante", afirma Grau, quien añade que los partidos independentistas "tendrán que bajar de la parra en algún momento".

Entendimiento con el PSC

Anna Grau se muestra "muy crítica" con el PSC, que considera que "se ha tragado bastantes más sapos que ERC" en los pactos de los últimos meses con el Govern de Aragonès. En este sentido, la portavoz de Cs afirma que los socialistas "nunca deberían haber permitido ciertas cosas", como la política lingüística en la escuela. "Podrían haber encontrado otras formas de entenderse con los nacionalistas sin tener que hacer ciertas concesiones", indica. Sin embargo, Grau también reivindica que ambos partidos han demostrado "capacidad de entenderse", con pactos como el gobierno municipal de Santa Coloma de Gramenet. En ese municipio acordaron con la alcaldesa socialista Núria Parlon la incorporación al ejecutivo con las carteras de seguridad y promoción económica. "Al PSC le haría más bien entenderse con nosotros que con otra gente", concluye al respecto.

Aragonés, "acorralado"

En cuanto a la legislatura catalana, Anna Grau señala que "ya llevaba tiempo sufriendo un bloqueo institucional tenaz", pero descarta que el presidente Pere Aragonès avance las elecciones al Parlament. No le ve "ninguna intención" de convocarlas. "La experiencia nos dice que, cuando la gente se ve acorralada, no tiene nada de prisa", apunta la portavoz de Cs, que sostiene que, al jefe de Gobierno, "el marco político le es hostil". "Podría ocurrir que el señor Aragonés adelantara elecciones y al día siguiente la situación fuera la misma", constata la dirigente de la formación liberal. Lo contrapone con el adelanto electoral de Pedro Sánchez, quien "interpretó que podía frenar el crecimiento previsible del PP" y que "le ha servido para bloquear a sus rivales".

De cara al nuevo curso político que arranca en septiembre, Anna Grau "da por sentado" que no habrá nuevos presupuestos de la Generalitat y que se prorrogarán los que hoy están en vigor. Tras las negociaciones complicadas por las cuentas de este año, no ve las "condiciones" para que Aragonès presente un nuevo proyecto y pueda acordarlo con el PSC y Junts.