Ayuso dice que no disputará el liderazgo a Feijóo pero revela que se lo han pedido

Isabel Díaz Ayuso, presidenta autonómica y presidenta del históricamente poderoso PP de Madrid, ofreció este miércoles una rueda de prensa para zanjar la polémica sobre un posible enfrentamiento con Alberto Núñez Feijóo, líder del partido a nivel español.

Tras las elecciones generales del domingo, que Feijóo ganó pero con un resultado insuficiente para poder gobernar, una parte del partido ha mirado a Ayuso. La inquietud también alcanzó al propio equipo del presidente del PP, consciente de que el liderazgo del político gallego ha quedado dañado. Esperanza Aguirre, antecesora de Ayuso en su doble cargo en Madrid, llegó a decir el martes que "el futuro" del PP pasa por la joven política. Consciente de la capacidad de influencia de Aguirre, la presidenta autonómica decidió aclarar las cosas. Ayuso agradeció a la veterana política su confianza, pero frenó en seco su deseo. "No puede ser que el jueves estuviéramos en un mitin con el presidente, aplaudiéndole, dándole nuestro apoyo y el martes tirándole por un puente (...) No somos podemitas", afirmó ante los periodistas.

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Eso sí, a preguntas de la prensa, quiso revelar que ha recibido mensajes animándola a dar un golpe en la mesa y disputar el cargo a su jefe de filas. "Pero no los estoy ni abriendo", soltó.

La intervención de Ayuso fue seguida en directo por varios barones preeminentes en el PP. Uno insistía, como ya apuntaba el mismo lunes, que "no hay clima" en estos momentos en el partido para otro relevo traumático. Hay que recordar que la presidenta madrileña acabó con Pablo Casado, líder del PP entre julio de 2018 y abril de 2022, porque acusó a Ayuso de tener una conducta "no ejemplar" por conceder a su hermano una comisión exorbitada en un contrato de mascarillas en plena pandemia.

El pulso lo ganó ella con la ayuda del propio Feijóo y Juanma Moreno, presidente de la Junta de Andalucía. Ella y Moreno son en estos momentos las dos caras del futuro del partido en la era post-Feijóo, llegue cuando llegue.

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Otro presidente autonómico apuntaba en clave interna que Ayuso "no puede tener dos cadáveres en su cuenta si quiere tener números para liderar el PP algún día". "En el partido no se entendería esa manera de actuar", continuaba. El político gallego, además, ha logrado subir el número de escaños de 89 a 136 y el calendario que tiene por delante no es fácil, con elecciones europeas, gallegas y vascas el próximo año.

El "sí" del Rey

En su intervención, Ayuso dio por hecho que Sánchez va a seguir de presidente del Gobierno gracias a los "enemigos de España", en referencia a ERC, Junts y EH Bildu. Respecto a qué cree que debe hacer ahora Feijóo, quien ha asegurado que quiere intentar armar una mayoría parlamentaria que se vislumbra imposible, Ayuso afirmó que entiende que quiera "pelear" por ello. "La única batalla que se pierde es la que no se da", dijo antes de mostrar su deseo de que Felipe VI le dé su "sí" como candidato para presentarse a la investidura. "Ojalá lo tenga y pueda presentar su proyecto", apuntó.

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Feijóo dispone de dos vías para convertirse en presidente y ninguna pinta bien: con la ayuda del PSOE, pidiéndole su abstención o un pacto entre "dos partidos de Estado"; o forjando una alianza con Vox, PNV, Coalición Canaria y Unión del Pueblo Navarro que los nacionalistas vascos ya han vetado. Ante la primera opción, la presidenta madrileña avisó a Feijóo de que "con el desastre no hay que pactar" y añadió que ve "francamente difícil conseguir el apoyo del Partido Socialista". La dirigente, eso sí, marcó la diferencia entre Sánchez y el resto de parlamentarios socialistas, aludiendo a la posibilidad de convencer a algunos de ellos para que apoyen a Feijóo, algo a lo que horas antes se había referido el portavoz de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, que habló de diputados del PSOE "bueno".