28-M: Suspense en Barcelona, continuidad en Catalunya, incertidumbre en España

Una predicción no es una encuesta. Los sondeos trabajan con muestras representativas de electores a los que se les pregunta directamente a quién tienen previsto votar, y con esas respuestas se estiman los resultados de cada partido. El mercado de predicciones Predilect que EL PERIÓDICO ha puesto en marcha esta semana se basa en los pronósticos de 400 especialistas que traducen en probabilidades de victoria todos los acontecimientos que suceden en una campaña: mítines, entrevistas, debates, encuestas, pifias, golpes de efecto... Al partir de muestras y variables distintas, los resultados de una y otra herramienta pueden ser diferentes. Pero, en ambos casos, hay que fijarse sobre todo en las tendencias que marcan. Las subidas y bajadas de cada partido son el mejor termómetro de lo que puede pasar en las urnas. Y en esta primera semana, Predilect y las encuestas ya nos permiten esbozar tres primeras conclusiones.

Barcelona

La competición en Barcelona está mucho más abierta de lo que indican los sondeos. Encuestas en mano, el pulso a cuatro entre Ada Colau, Xavier Trias, Jaume Collboni y Ernest Maragall se había convertido en un cuerpo a cuerpo entre el exalcalde de CiU ahora en Junts y el candidato del PSC, que plantó a la alcaldesa precisamente para minimizar la factura que podría pasarle cuatro años de gobierno con los Comuns. Las predicciones de los especialistas advierten ahora de que Colau puede volver a dar la sorpresa que dio en 2019, cuando salvó la alcaldía gracias a Manuel Valls. Ha estado en cabeza todo abril, pero estos últimos días se ha visto superada por Collboni y la diferencia entre ambos es de solo dos puntos.

En el promedio de las encuestas también ha habido vuelco, pero en este caso es Junts el que le ha arrebatado la primera posición al PSC y le saca ahora 1,7 puntos. En concejales, Trias, con 11, tendría un edil más que Colau y Collboni. La baza electoral de la alcaldesa para compensar el desgaste por su gestión es el voto anti-Trias y agitar el miedo, no del todo neutralizado por Collboni, a un pacto Junts-PSC como el de la Diputación de Barcelona. En Barcelona en Comú aseguran que hay mucho voto oculto porque admitir que votarás a Colau no está ya tan de moda. Según Predilect, la fórmula más probable que alumbrará el futuro gobierno municipal será el tripartito de izquierdas. Que igual ya no es tan anatema.

Catalunya

En el resto de Catalunya habrá dos grandes batallas superpuestas: ERC contra Junts por el triunfo general en votos y alcaldías, y ERC contra el PSC por la conquista (o la influencia) en las capitales y los grandes feudos metropolitanos. Los republicanos ganaron en 2019 y han batido ahora su récord de candidaturas, mientras que JxCat no ha conseguido llegar a las 800 listas que se había fijado como objetivo. El PSC quiere hacerse fuerte, otra vez, en el área metropolitana y frenar el auge de Esquerra en su histórico bastión. A un mes vista, en Badalona, la fotografía de Predilect sonríe de momento a Xavier García Albiol y la pugna está entre los socios del actual cuatripartito (PSC, ERC, Comuns y Junts). Los republicanos están por delante del hoy alcalde, el socialista Rubén Guijarro.

Las predicciones electorales sitúan a Núria Parlon en condiciones de revalidar su apabullante mayoría absoluta en Santa Coloma de Gramenet, donde la apuesta por Gabriel Rufián le serviría a ERC para colocarse como primera alternativa en la oposición. Núria Marín también lo tiene bastante fácil en L'Hospitalet, aunque su actual mayoría es más ajustada. En un mes han crecido 10 puntos sus opciones de seguir como alcaldesa. La lucha entre ERC y PSC se reproduce en Lleida y Tarragona, donde sendos alcaldes de Esquerra se juegan las varas de mando que le quitaron a los socialistas hace cuatro años. Los especialistas vaticinan vuelco en Tarragona y continuidad en Lleida y Girona, donde Junts se consolidaría pese a las convulsiones internas.

España

En clave nacional, el ganador del 28-M se medirá tanto en votos como en feudos conquistados al adversario. Las encuestas autonómicas confirman que en la Comunitat Valenciana estará la batalla más igualada entre PSOE y PP, pero los gobiernos socialistas de Aragón, Baleares, Canarias y La Rioja se mueven en márgenes muy estrechos respecto a las derechas. En Madrid hay poca tela que cortar. Tanto las predicciones como las encuestas otorgan a Isabel Díaz Ayuso una holgada ventaja, pero de nuevo sin la mayoría absoluta que le permitiría sacar del tablero a Vox. Por eso el gobierno más probable, según Predilect, es el del PP en solitario, pero la alianza con los ultras mantiene un 25% de probabilidades.

En definitiva, los bloques de la izquierda y de la derecha están tan empatados que puede suceder cualquier cosa. El electorado conservador está más movilizado que el progresista, pero ninguno de los dos aliados naturales de PSOE y PP (Unidas Podemos y Vox) están en su mejor momento.

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