Choque con la plantilla

El Parlament revoca las licencias por edad y fija prejubilaciones sin acuerdo con los funcionarios

Los empleados que disfrutan de la paga deberán regresar a su puesto de trabajo en el Parlament antes del 1 de noviembre

La presidenta del Parlament, Laura Borràs, junto a la secretaria de la Mesa, Aurora Madaula y el jefe de prensa, Pep Elias.

La presidenta del Parlament, Laura Borràs, junto a la secretaria de la Mesa, Aurora Madaula y el jefe de prensa, Pep Elias. / Kike Rincón

Júlia Regué

Júlia Regué

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El Parlament ha aprobado este jueves la revocación de las licencias por edad, una suerte de prejubilación pagada sin trabajar para los que tuvieran 60 años y llevaran 15 en la institución, después de que fueran eliminadas de la normativa. Con esta decisión, se obliga a los funcionarios que disfrutan de la paga a regresar a su puesto de trabajo antes del 1 de noviembre. Paralelamente, el órgano rector ha fijado unas nuevas condiciones a modo de prejubilaciones, que pasan por reducciones de jornada progresiva hasta alcanzar la edad de jubilación de forma bonificada, pero con importes menores respecto al anterior régimen.

Todo esto se ha aprobado en la Mesa ampliada y se ha convalidado en la comisión de asuntos institucionales con el voto favorable del PSC, ERC y Junts, el 'no' de Vox y 'comuns' y la abstención de la CUP y Cs; pese a no contar con el aval del consejo de personal, que se opone a esta nueva norma porque es una propuesta que se planteó una vez habían suscrito un acuerdo firmado con condiciones más beneficiosas y del que la Mesa acabó desdiciéndose. La plantilla denuncia "inseguridad jurídica" y reclama un mediador para encarar un conflicto laboral que previsiblemente terminará en los tribunales.

Teletrabajo al 100%

Como avanzó este diario, la treintena de personas que disfrutan de la paga deberán regresar a sus puestos de trabajo antes del 1 de noviembre bajo condiciones concretas. Si su sitio ha sido amortizado o modificado, deberán ser adjudicados a otro de su misma categoría y todos los reincorporados podrán teletrabajar durante toda la jornada laboral. Están exentos de volver a la Cámara los que se jubilen en menos de un año o los que tengan una baja médica, mientras que los que residan fuera de Catalunya, tengan un familiar a cargo hasta el segundo grade de consanguinidad con una discapacidad reconocida igual o superior al 65% o con grado de dependencia, podrán esperar seis meses más (hasta mayo de 2023) antes de volver a formar parte de la plantilla.

Todos ellos, al igual que el resto de funcionarios, podrán acogerse al nuevo régimen de prejubilaciones que prevé reducciones de jornada incentivadas hasta la jubilación. Los trabajadores mayores de 60 años, cuando les queden cinco años o menos para la jubilación, y que acrediten 25 años de servicios efectivos prestados a la Cámara, pueden pedir un permiso de tiempo completo, "como si se tratase de una prejubilación". Los que no tengan tantos años de servicio, pueden reducirse a la mitad la jornada cuando les queden cinco años para la jubilación.

El consejo de personal sí había aceptado una propuesta anterior, muy parecida, que ya había sido votada y avalada en la Mesa, pendiente de ser convalidada por la comisión de asuntos institucionales. Pero la presidenta del Parlament, Laura Borràs, terminó desdiciéndose alegando que entendía que ese pacto se circunscribía sólo a los que ya cobraban las licencias y no a todos los trabajadores, aunque varias fuentes confirman que la jefa de recursos humanos explicó la propuesta y que, además, hubo más de 10 encuentros y varios documentos en los que quedaba claro. Sea como sea, finalmente se aprobará hoy un nuevo régimen general que no ha sido avalado por los trabajadores.