El Govern abre nuevas delegaciones en el exterior "sin tutelas"

La apertura de delegaciones del Govern en el Exterior es un termómetro de la intensidad del desafío soberanista. Ahora, un año después de la llegada al Govern de una 'consellera' de Exteriors propuesta por Junts per Catalunya (el partido del 'expresident' Carles Puigdemont, quien más abandera la necesidad de la diplomacia secesionista), Victòria Alsina anuncia la apertura de seis nuevas 'embajadas' en Japón, Corea del Sur, Brasil, Andorra y África (Dakar y Pretoria) que suman a las 14 existentes. Lo hizo con toda la pompa en un acto propagandístico en el palacio de Pedralbes. Con todo, el gasto en 'embajadas' no es ni de lejos el corazón de su 'conselleria' y pasa de 8 a 12 millones.

El nuevo impulso se presentó con vehemencia ante cónsules y cargos del Govern, convenientemente citados en Pedralbes, y con la retórica nacionalista de la determinación de Catalunya de "tener voz en el exterior sin tutelas y sin intermediarios". Sin embargo, Alsina evitó en todo momento de su discurso vincular este despliegue a la voluntad de internacionalizar el mensaje independentista. Lo argumentó con motivos económicos, comerciales o solidarios.

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"Viajaremos y hablaremos del país como nunca"

"Tengo una mala noticia para las personas que han querido que nos quedemos en casa, que actuemos como una diputación provincial o ayuntamiento", apuntó en tono de autoafirmación. "Viajaremos y hablaremos de nuestro país como nunca se ha hecho", proclamó. "Para que todos sepan que somos socios fiables, excelentes en muchos ámbitos, solidarios... porque para una nación como Catalunya hacer acción exterior es como respirar", añadió.

Exteriores avisa de que "si se cumplen las premisas, no habrá problema" con las nuevas 'embajadas', pero de lo contrario no serán autorizadas

Desde el Ministerio de Exteriores que dirige el socialista José Manuel Albares confirmaron a este diario que la Generalitat sí les había trasladado su intención de abrir algunas delegaciones (Andorra, Brasil, Corea del Sur, Japón, Senegal y Sudáfrica). "Les hemos respondido que su tramitación debe seguir los cauces establecidos por la ley (con los informes perceptivos, entre otros, de Asuntos Exteriores). Y sobre todo, que debe hacerse bajo las premisas de respeto a la Constitución y los ámbitos competenciales que esta establece, coordinación con nuestras embajadas en esos países y respeto a la unidad de acción en el exterior". Dicho de otro modo, que "si se cumplen las premisas, no habrá problema", pero de lo contrario no serán autorizadas.

Ayuda humanitaria a Ucrania

Alsina criticó además al Tribunal de Cuentas por el proceso abierto contra la acción exterior por eventuales gastos vinculados al 'procés'. "La acción exterior ha sido la excusa para intentar conseguir la muerte política y civil de personas por pensar lo que pensaban", aseguró.

"Estamos ante una invasión militar injustificable, un drama humanitario que irá creciendo en las próximas semanas" hasta los cinco o seis millones, advirtió por otra parte la titular de Exteriores sobre la invasión rusa y mostró el apoyo a Ucrania desde la Agencia Catalana de Cooperació en términos de ayuda humanitaria.

La apertura o cierre de delegaciones del Govern en el exterior ha corrido en paralelo a las diversas etapas del nacionalismo. Durante los mandatos del 'president' Jordi Pujol, la acción exterior se desplegó siempre bajo acuerdo con el Ministerio de Exteriores, no sin diversos escarceos. En periodo de acuerdos de Artur Mas con el PP de Alicia Sánchez-Camacho, se llegó a un acuerdo para recortar esta política exterior y limitarla al ámbito comercial. Tras el avance del independentismo, se desplegaron nuevas delegaciones, que quedaron abortadas por la suspensión de la autonomía, tras lo cual se planteó otra ofensiva, rechazada por el Gobierno ante los tribunales. Ahora no existe litigio alguno en este capítulo, según fuentes del Govern.