Pacto en la Mesa

El Parlament elimina las licencias por edad sin negociar con los trabajadores

Los funcionarios que ya se han acogido a este régimen especial podrán seguir cobrando hasta que se jubilen porque se trata de derechos adquiridos

La secretaria general y el exletrado mayor se enfrentan por carta y se achacan mutuamente la falta de transparencia en la institución

Hemiciclo del Parlament de Catalunya.

Hemiciclo del Parlament de Catalunya. / Europa Press

Júlia Regué

Júlia Regué

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La Mesa del Parlament pone fin al régimen que permite a los funcionarios de la institución prejubilarse con 60 años y seguir cobrando sin ir a trabajar. Después de haber acordado, la semana pasada, abrir una negociación colectiva con los empleados para tratar de extinguir las licencias por edad, los grupos con representación en el órgano recularon este martes de nuevo y pactaron eliminar el artículo 79 de los Estatutos de régimen y gobierno internos del Parlament (ERGI), fijando así supresión de esta disposición como punto de partida de las conversaciones con los trabajadores e iniciando el procedimiento para una nueva regulación.

Pero la medida no puede tener efectos retroactivos porque se trata de derechos adquiridos, por lo que no afectará a los 21 funcionarios que están acogidos a este régimen que supone un gasto de 1,7 millones de euros anuales, sino que impactará en el resto de la plantilla, que ya no podrá solicitar la paga a partir de este 2022. Ahora bien, está por ver en qué lugar quedan los 12 funcionarios que pidieron la concesión de esta paga en 2021 y que todavía no la cobran, ya que los letrados están elaborando un informe para aclararlo.

La Mesa ejecuta así un nuevo viraje después de que el 21 de diciembre se acordara reducir de cinco a tres años el plazo en el que poder cobrar esta retribución y de que el 18 de enero se apostara por negociar primero con los trabajadores. El enésimo pacto es que entablen cuanto antes con el consejo de personal para abordar cómo se prejubilan los funcionarios a partir de ahora, y que se dé cuenta de la eliminación de las licencias por edad en una Mesa ampliada y después en una votación que saldrá adelante en la comisión de Asuntos Internos, ya que hay mayoría suficiente para tomar esta decisión. Fuentes parlamentarias subrayaron que seguirán adelante aunque haya oposición por parte del personal.

Paralelamente, empezarán a reformular la transparencia interna de la Cámara y en 15 días pondrán en común las propuestas de los partidos para hacerla más accesible.

Choque al más alto nivel

El encuentro ordinario fue especialmente tenso. Los miembros de la Mesa se despertaron con un correo electrónico del exletrado mayor del Parlament, Antoni Bayona, con una misiva adjunta avanzada por RAC1 y enviada sobre las doce de la madrugada de la noche anterior. Bajo el título ‘Memorándum’, Bayona justificaba su dimisión del órgano de transparencia interno cargando contra la secretaria general, Esther Andreu, a quien acusaba de obstaculizar sistemáticamente las peticiones de información pública. Llegó incluso a solicitar que se abra una investigación interna sobre su actuación, hecho que enervó a Andreu que, envió un comunicado muy duro en el que negaba "rotundamente" todas las acusaciones y le achacaba a él el bloqueo del órgano de transparencia por su "actitud y comportamiento respecto a otra compañera" del ente. En su misiva Bayona ya se anticipaba y criticaba que se pudiera hacer "una lectura parcial de este escrito para deducir del mismo un supuesto de acoso laboral imputable a mi persona". Fuentes parlamentarias apuntaron que la dimisión de la encargada del archivo, una de las tres figuras que lideraban el órgano de transparencia, se debe a las presiones de Bayona, aunque el letrado lo niega.