en una carta

Torra lleva a la UE su pulso con el Gobierno por el confinamiento

Torra, este lunes.

Torra, este lunes. / periodico

Fidel Masreal

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En paralelo a la creciente gravedad de la crisis sanitaria, crece también la polémica política por las críticas abiertas del Govern de Quim Torra a la gestión de la pandemia por parte del Gobierno. El 'president' sigue percutiendo públicamente contra el Ejecutivo de Pedro Sánchez y ha llevado el caso a las instituciones europeas, que le han recordado de entrada que la gestión es competencia de los Estados miembros. Mientras, el Gobierno eleva también el tono y llama mentiroso a Torra y sigue rechazando atender a sus exigencias.

Torra ha hecho llegar ya su queja por carta al presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von Der Leyen, y al presidente del Comité de las Regiones, Apostolos Tzitzikostas. En la misiva explica su exigencia al Gobierno para que decrete un "confinamiento obligatorio" para que no se pueda entrar o salir de Catalunya. Torra apela a las recomendaciones de la OMS y advierte que es necesario "asegurar la máxima coordinación entre todos los niveles de gobernanza". En una entrevista en Catalunya Ràdio, Torra prometía llevar "las reivindicaciones donde sea necesario".

En una primera respuesta de la UE, el portavoz comunitario de Justicia, Christian Wigand, ha afirmado que las autoridades españolas han informado de las medidas. "La Comisión apoya los esfuerzos de todos los estados miembors", subrayó el portavoz de la comisión.

Torra ha decidido pues elevar el nivel de queja a nivel internacional. Ya lo hizo en una entrevista a la cadena británica BBC. Todo ello le ha valido severas críticas del Gobierno español, acusándolo de "faltar a la verdad" y de "sembrar discordia" -en palabras de la ministra de Defensa, Margarita Robles- en sus tesis sobre la posición del Ejecutivo español. También el PP, Ciudadanos y Vox cargaron contra Torra con vehemencia. El PSC ha afeado también al 'president' su decisión de amplificar la polémica a nivel internacional.

Incluso la portavoz de ERC, Marta Vilalta, de forma sutil, lanzó una crítica a todos. En declaraciones a Ràdio 4, Vilalta opinó que "nos equivocaríamos si hiciéramos una batalla política o partidista, de politiquería, de intentar sacar un rédito en esta situación de crisis".

Preguntada sobre esta nueva polémica y las críticas recibidas, la 'consellera' de Presidència y portavoz del Govern, Meritxell Budó, insistió: "El Estado no ha decretado un confinamiento total como sí estamos reclamando; buscar conflictos donde no los hay, no toca".  "Desgraciadamente no es una batalla política, no va de banderas ni de territorios", insistió, insistiendo en que el origen de las críticas de la Generalitat son motivaciones de salud pública. 

Torra pone condiciones

Budó dejó en el aire la participación del Torra en la reunión de presidentes autonómicos del próximo domingo y ha pedido que esta cita "recoja las peticiones de los territorios y no sea de trasmisión de información unidireccional del Gobierno".

Buch y el Ejército

Otra muestra del sesgo político que siguen teniendo ciertas posiciones institucionales son las respuestas que está ofreciendo el 'conseller' de Interior, Miquel Buch, respecto a la actuación del Ejército en Catalunya. "Este país esta capacitado para afrontar emergencias como la que estamos afrontando", apuntó ayer en relación a la actuación de las fuerzas armadas. Buch se quejó de nuevo del decreto del Gobierno que subordina a los Mossos a las decisiones del Gobierno. "Desgraciadamente estamos subordinados al Estado", apuntó.