ERC y JxCat mantendrán el pulso por la Diputación hasta el último minuto

A menos que lo imprevisto reine, el PSC volverá a liderar la Diputación de Barcelona, tras ocho años de paréntesis convergente e independentista. JxCat parece firme en su intención de mantener el pacto sellado con los socialistas y desoír los cantos de sirena de ERC que le ofrece incluso la presidencia si abandona al PSC. La batalla entre ERC y JxCat se centra ahora en la imagen y en el relato. Los republicanos mantienen que su oferta es posible y que los posconvergentes simplemente prefieren a los socialistas y JxCat que no hay opciones de pacto por cuanto los ‘comuns’ lo impiden. Algo que desmienten los propios posecosocialistas.

Cuando el pasado viernes se hizo público el pacto PSC-JxCat, hasta el más optimista de los republicanos dio por perdido el ente provincial. Pero al tiempo, se abrió para ERC la oportunidad de devolver la pelota a los convergentes que les habían puesto a los pies de los caballos de los híperventilados a cuenta de la unidad secesionista. Y, en clave de futuro, en el lado Besòs de la calle de Calabria (el PDECat está en la ‘orilla’ Llobregat) se vio el pacto con uno de los artífices del 155 como un buen antídoto contra futuras campañas a favor de las listas únicas.

Los republicanos señalaron a  todo aquel que quisiera oír que la opción de JxCat de apostar por el PSC obedece, simplemente, a su propia voluntad. O al deseo de no pactar con ERC. Queda de fondo la sospecha de que en la lucha entre unos y otros por la hegemonía catalana pesa más la táctica de evitar que ERC entre en un gobierno que gestiona 1.000 millones de euros  que no la de tender puentes con los socialistas.

Así las cosas, sin acuerdo alguno, los republicanos presentarán su propio candidato, el actual vicepresidente de la corporación Dionís Guiteras, en el pleno de la Diputación: “Los posconvergentes tienen hasta el último minuto para que la Diputación vaya a manos del independentismo”, aseveró el presidente del grupo parlamentario de ERC, Sergi Sabrià.

JxCat insiste en los 'comuns'

 JxCat respondió a lo largo del día a los ataques de ERC insistiendo en que el pacto en la Diputación no era posible sin el concurso de los ‘comuns’ y añadiendo que además los republicanos debían también dar marcha atrás en los pactos locales que han descabalgado del poder a los posconvergentes en municipios como Sant Cugat del Vallès.

Si de algo ha servido esta enésima crisis es para cohesionar un espacio, el de la posconvergencia en el que todos, con la notable excepción del ‘expresident’ Carles Puigdemont, salieron ayer a defender el posible acuerdo con el PSC frente a ERC, no sin asumir, en palabras del ‘president’ Torra en respuesta a un dardo del republicano Sergi Sabrià (quien le pidió estar “a la altura” en “todas” las instituciones), que todos los independentistas, incluido JxCat tienen que “reconocer que existen estas contradicciones [los pactos con el PSC], pero tenemos que ver dónde empezaron y todo lo que ha pasado".

Una referencia de Torra a la raíz del conflicto: la investidura fallida de Puigdemont en enero del 2018 que ERC no quiso llevar a cabo porque significaba desafiar de nuevo a la legalidad española y porque no conducía a nada, toda vez que hubiera sido invalidada a la carrera.

Así las cosas, los posconvergentes defienden la alianza con el PSC porque, en palabras de la ‘consellera’ Àngels Chacón en Els Matins de TV3, “es el mejor de los pactos tal como tenemos las matemáticas y las declaraciones públicas”. El mensaje de JxCat es el de que ERC no está en condiciones de invocar a la unidad independentista cuando no quere participar en listas electorales conjuntas.

Chacón apuntó ayer a la cuestión de fondo: la falta de una estrategia unificada en la llamada hoja de ruta. Es decir, que el desacuerdo es total: táctico y estratégico, ideológico y personal.

Protestas por el pacto con el PSC

Unas 300 personas, convocadas por la ANC, se manifestaron este miércoles frente a las sedes del PDECat y ERC para exigir que rompan los pactos con el PSC en municipios y también en la Diputación de Barcelona. Los manifestantes alzaron carteles en los que se podía leer "ni pactos ni abstenciones con el 155" y gritaron proclamas como "No os votaremos", "JxCat y Esquerra se nos acaba la paciencia", "No sois dignos del pueblo catalán", "Botiflers", "Traidores" o "¿Qué estáis haciendo con nuestros votos?".