debate soberanista

El PSC, crítico con el discurso del Rey sobre Catalunya

Parlon, Marín y Collboni lamentan la intervención del Monarca

El rey Felipe VI, durante su discurso sobre la situación en Catalunya.

El rey Felipe VI, durante su discurso sobre la situación en Catalunya. / EL PERIÓDICO

Roger Pascual / Barcelona

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El discurso del rey Felipe VI no sentó bien en la mayoría de formaciones políticas catalanas. Y no solo entre las filas soberanistas o en las de los 'comuns'. Tampoco fue bien recibido en el PSC, donde generó una profunda decepción que varios pesos pesados no dudaron en exteriorizar. 

"Al Rey tendemos a pedirle que haga política, que es lo que no puede hacer", intentó terciar en Antena 3 Miquel Iceta. El primer secretario evitó reforzar el descontento que muchos de sus compañeros de partido sintieron y que habían verbalizado figuras como Núria Marin, Núria Parlon y Jaume Collboni.   

"Esperábamos más. Esperaba una puerta abierta al diálogo y al consenso. Preocupada, muy preocupada", escribió Marín, alcaldesa de L'Hospitalet y mano derecha de Iceta, que el pasado domingo se presentó en un instituto para exigir a la Policía Nacional que cesaran las cargas y que se fueran de la ciudad.

Más contundente incluso fue Núria Parlon. "Necesitamos algo más que un Rey algo republicano que de fondo, en un discurso como el de hoy [por este martes], deje ver a Carlos III", soltó la alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet, que forma parte de la Ejecutiva del PSOE, en el que también hubo opiniones críticas con la intervención del Monarca. 

Jaume Collboni, responsable de política municipal del PSC desde que Parlon entró en la Ejecutiva, también mostró su decepción. "Después de una jornada de protestas pacíficas, un mensaje sin ni una iniciativa concreta de diálogo.Ni una. Muy preocupado", comentó en su Twitter.

El eurodiputado Javi López también consideró que era una "oportunidad perdida". "Y no nos quedan muchas. La historia nos está pasando por delante. Y espero que no nos acabe pasando por encima", escribió. Pese a no decirlo públicamente, otros socialistas catalanes explican en privado su desazón con el Monarca y con el hecho de que no hiciera ni una sola mención a los 893 heridos.