Margallo esgrime la posibilidad de suspender la autonomía

José Manuel García Margallo conversa con Carme Chacón al término del desayuno informativo.

José Manuel García Margallo conversa con Carme Chacón al término del desayuno informativo.

PILAR SANTOS / MADRID

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Ajeno a la línea de «prudencia y tacto» que tanto el presidente del Gobierno , Mariano Rajoy, como la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, se han impuesto a la hora de abordar públicamente el «desafío soberanista» en Catalunya a fin de no provocar más tensiones, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo, elevó ayer en unos cuantos grados la crispación del debate al esgrimir la posibilidad de que la autonomía catalana sea suspendida si Artur Mas mantiene su voluntad de convocar la consulta del 9-N. Una advertencia que, según apuntaron fuentes de la presidencia, Rajoy no comparte puesto que  tiene «la convicción» de que Mas cumplirá su palabra de actuar dentro de la legalidad.

Margallo pronunció ayer una conferencia en Madrid -en la que habló ante 58 embajadores de todo el mundo- en la que sugirió que el Ejecutivo podía suspender la autonomía si Mas vulneraba la ley. «El Gobierno lo único que puede hacer es utilizar todos los medios a su alcance, toda la ley, solo la ley, pero toda la ley, para evitar que se produzca un referendo de secesión», afirmó. ¿Incluida la suspensión de autonomía?, le preguntó el moderador del acto. «Incluido lo que haya que incluir para que esa consulta no se celebre. Hay que respetar la Constitución y las leyes y hacerlas respetar», añadió Margallo.

La suspensión de la autonomía es, según algunos juristas, una opción posible que se puede apoyar en el artículo 155 de la Constitución [ver recuadro adjunto]. Hasta ahora ningún miembro del Ejecutivo, y mucho menos el presidente, había reconocido que esa posibilidad estuviera encima de la mesa. De hecho, en los dos últimos años, habían sorteado todas las preguntas que se les había planteado sobre esta cuestión. Hasta ayer, en que Margallo abordó de cara el asunto y, según fuentes de su departamento, se limitó a recordar el margen que da la Constitución española.

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, marcó distancias con la advertencia y aseguró en Washington,  donde está de viaje oficial, que «en ningún momento, ningún ministro ni el presidente» le han hablado de la posibilidad «de suspender la autonomíma de Catalunya», informa Ricardo Mir de Francia.

CON CONTUNDENCIA / La amenaza del jefe de la diplomacia fue censurada por la oposición, que le acusó de echar «más leña al fuego», en palabras del PSOE, y respondida con una advertencia por Mas. «No se piensen que con eso pararán el curso de la historia», dijo en el Parlament.

El jefe de la diplomacia tuvo tiempo de matizar sus palabras, pero no lo hizo. El titular de Exteriores compareció en la comisión del Congreso, donde, durante tres horas y media, debatió con los grupos parlamentarios sobre varios asuntos, también este. La única idea nueva que introdujo, tras repetir que el Ejecutivo será «contundente» en la aplicación de la ley, es que se mostró «absolutamente seguro» de que Mas echará el freno cuando Rajoy recurra ante el  Constitucional la ley de consultas y la convocatoria del referendo.

El portavoz del PNV, Aitor Esteban, antes de entrar en la comisión, planteó si el uso de todos los mecanismos legales incluye también «el envío de tanques», algo a lo que Margallo se limitó a contestar: «Eso no me parece que esté en la Constitución». Ante semejante escalada de declaraciones, la Moncloa decidió actuar y cortar la polémica.

RECURSOS LA SEMANA QUE VIENE / A ese mismo desayuno que marcó la jornada informativa en Madrid acudió también el ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, que comentó que está volcado en «el desafío soberanista» y en la preparación de «uno o más recursos ante el Constitucional» para evitar preguntas sobre el parón de la reforma del aborto. «Esto terminará la semana que viene», añadió, dando a entender que las demandas se presentarán con la máxima rapidez.