Elecciones en Catalunya
Joan López Alegre

Joan López Alegre

Periodista y exdiputado en el Parlament

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El nacionalismo moderado no existe, idiota

El PP olvida que en Catalunya ha tenido éxito cuando se dirige a aquellos que están huérfanos de representación política y a los que tanto los independentistas como el PSC quieren invisibilizar: los catalanes no nacionalistas

División en el PP sobre si Alejandro Fernández debe ser el candidato a las elecciones del 12-M

Entidades constitucionalistas apuestan por Alejandro Fernández para ser candidato del PP

El presidente del PP en Catalunya, Alejandro Fernández, interviene en el pleno de los Presupuestos 2024 en el Parlament.

El presidente del PP en Catalunya, Alejandro Fernández, interviene en el pleno de los Presupuestos 2024 en el Parlament. / David Zorrakino

El PP no acaba de decidir qué quiere ser en Catalunya cuando sea mayor. No es la primera vez que los populares plantean operaciones para seducir a un presunto electorado nacionalista moderado. En los años 90 del siglo XX fue la operación Trias de Bes, luego vino Josep Piqué, ahora Feijóo habla de catalanismo cordial.

Desde Génova 13, una y otra vez, buscan el Santo Grial que le señalan desde las élites catalanas cercanas a las patronales, el Cercle d'Economia y otros lugares 'Upper Diagonal' y olvidan que en Catalunya han tenido éxito cuando se dirigen a aquellos que están huérfanos de representación política y a los que tanto los independentistas como el PSC quieren invisibilizar: los catalanes no nacionalistas, los que desde la oficialidad se perciben como inadaptados, 'ñordos'.

El éxito de García Albiol y el de Cs en 2017 se basó en ese electorado. El error de los dirigentes del PP en Madrid es comprar el marco mental de las élites nacionalistas y preferir pasar una tarde en el Ecuestre en lugar de en un bar de L’ Hospitalet.

Feijóo tiene derecho a reunirse con Puigdemont, pero como dijo en su día Miquel Iceta, cuando aún creía que la amnistía era inconstitucional, el verdadero diálogo no debe ser entre el Gobierno de España y el de Catalunya si no entre catalanes.

El PP catalán será un partido útil cuando consiga representar al vasto universo catalán constitucionalista, formado por multitud de personas hartas de que les digan que solo se puede ser catalán al estilo de Junqueras, Pujol o Puigdemont.

El PP no se ha hecho ningún bien aireando sus dudas sobre Alejandro Fernández. Es más, le ha servido un balón de oro a Illa quien, si Fernández acaba siendo candidato, podrá espetarle: "Cállese, que a fin de cuentas usted es candidato porque no encontraron a ningún otro". Pero el debate sobre Alejandro Fernández ha tenido un efecto secundario imprevisto: muchas asociaciones constitucionalistas, siempre exquisitamente neutras entre Vox, Cs y el PP, se han posicionado a favor del candidato a candidato del PP.

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