Apunte

Sedes de empresa sin billete de vuelta

¿Volverán las más de 5.000 sedes de empresas que se marcharon de Catalunya?

Catalunya sigue perdiendo más sedes empresariales de las que gana

Banc Sabadell sede social Alicante

Banc Sabadell sede social Alicante

Agustí Sala

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El acuerdo del PSOE y Junts que allanó la investidura de Pedro Sánchez ha consolidado un marco político de hipérbole, simbolismo y frentismo. Cualquier tema provoca un terremoto, como la frase de ese pacto en la que se decía: "(...) En este ámbito, también se abordarán los elementos esenciales de un plan para facilitar y promover el regreso a Catalunya de la sede social de las empresas que cambiaron su ubicación a otros territorios en los últimos años".

Las interpretaciones se desataron e incluso hubo quien tradujo la frase como que se iba a forzar el regreso de muchas de las compañías que mudaron su sede social (más de 5.000) un poco antes y después del referéndum del 1 de octubre de 2017 en Catalunya. También empezaron las especulaciones y se llegó a hablar de aplicar a rajatabla la ley, es decir, obligar a que sede social y operativa (donde en realidad está el 'cerebro' de la empresa) coincidieran. En 2017, el Gobierno del PP facilitó la salida de sedes mediante una norma ad hoc ¿Se podría hacer lo mismo pero para facilitar el regreso?

Calma. Desde el Govern aseguran, sea por convicción o por contradecir a Junts, que "no hay nada de eso". El Ejecutivo de ERC presidido por Pere Aragonès defiende que primar o estimular el regreso de quienes se fueron sería discriminatorio respecto a quienes se quedaron. A nivel del Ibex 35, Grifols y Fluidra, por poner unos ejemplos, mantuvieron la sede social en Catalunya pese a la corriente masiva de marchas predominante en el otoño de 2017.

Lo cierto es que sigue habiendo más salidas de sedes que llegadas en Catalunya, pero el diferencial se ha reducido. Y desde la Generalitat destacan además, que Catalunya lidera la creación de empresas, además de atraer 'startups', inversiones extranjeras y centros de I+D de multinacionales.

Una vez cambiada de ubicación la sede es complicado echarse atrás. Pero en el Govern confían en que si se impone la estabilidad económica y política, algo que en buena parte está en su mano, empresas que compraron solo billete de ida opten por comprar el de vuelta. Veremos.

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