Limón & vinagre

Kim Kardashian: vende pezones contra el cambio climático

Paradójicamente, podemos contribuir a la lucha contra la desertización de la Tierra aparentando estar congeladas

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Kim Kardashian, en el anuncio de su nuevo sujetador con pezones falsos.

Kim Kardashian, en el anuncio de su nuevo sujetador con pezones falsos. / INSTAGRAM

Pilar Garcés

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En uno de mis capítulos favoritos de 'Friends', los amigos se echan en cara los secretos que se ocultan los unos a los otros. El más descacharrante involucra a Chandler Bing, el llorado Matthew Perry muerto hace dos semanas, quien confiesa para pasmo general que tiene tres tetillas. "Enséñanosla, enséñanosla", corea el resto. La tercera tetilla de Chandler es el secreto mejor guardado.

Pero quién necesita guardarse nada en época de narcisismo y sobreexposición, cuando podría ganarse unos miles de 'likes' con un selfi. La emprendedora modelo Kim Kardashian, de 43 años, que se ha hecho rica mostrando su vida y la de su familia minuto a minuto en 'reality shows' y redes sociales, cree que solo hay que esconder los michelines. Por eso, con su exitosa marca Skims, especializada en fajas y otros artilugios constrictores, ha sacado al mercado un sujetador con pezones incorporados que se marcan en la ropa diga lo que diga el termómetro. Una prenda indispensable para quien haya suscrito una de esas tarifas eléctricas que vende Belén Esteban para mantener su casa confortable en invierno, y no quiera renunciar, sin embargo, a unos pechos respingones.

El invento no es tal, pues ha existido de distintas formas a lo largo de la historia, con mayor o menor suerte, con y sin mensaje reivindicativo, pues al fin y al cabo es lo más parecido en cuanto a resultados visibles (para terceros) a ir sin sujetador. Pero si hay alguien que puede convertirlo en un éxito esa es Kim Kardashian, la locomotora de un clan de adictas al lujo superlativamente famosas. Ojo con minusvalorar a la mujer que alcanzó la fama siendo una veinteañera amiga íntima de Paris Hilton que protagonizó un vídeo porno con su novio.

Su compañía de ropa interior, creada hace cuatro años, valía 1.600 millones de dólares en 2021, momento en el que Forbes catalogó a la celebridad de multimillonaria, y se ha apreciado hasta los 4.000 en la actualidad. Ha sido seleccionada como marca oficial de la NBA, después de vestir por dentro al equipo olímpico estadounidense en Tokio.

Kardashian es la reina Midas en chándal y sin tabús. Aunque arrasa con su línea de prendas confortables para estar por casa, ha firmado colaboraciones con Fendi y con Swarovski, que pondrá sus codiciados cristales en las mallas y 'tops' de la norteamericana. Su firma de cosmética también alcanza cifras récord de ventas. La ambición empresarial de la 'ex' y madre de los cuatro hijos de Ye (el rapero antes llamado Kanye West) no conoce límites ni fronteras. Si ahora se propone suministrar pezones de mentira a las mujeres será que hay mercado; en caso contrario, se creará. ¿Y necesidad?

"No importa el calor que haga"

En un vídeo descacharrante, Kim Kardashian alude al cambio climático para vender The Ultimate Nipple Bra ('El sujetador de pezones definitivo'). Ataviada con una de sus prendas color carne, relata cómo la Tierra se está calentando y los niveles del mar suben. "No importa el calor que haga, siempre parecerá que hace frío. Hay días duros, pero estos pezones lo son más. Y a diferencia de los icebergs, no se van a ninguna parte", argumenta mostrando el sostén con sus copas artificialmente erectas. O sea, que paradójicamente podemos contribuir a la lucha contra la desertización de la Tierra aparentando estar congeladas. Viéndonos circular en plena canícula con nuestros pezones como timbres de castillo, el primo de Mariano Rajoy se reafirmará en su teoría de que la crisis climática en realidad no es para tanto, un invento de los rojos para atosigar a las grandes industrias extractivas. 

Las críticas a semejante banalización de un desafío ecológico global no se han hecho esperar; la defensa de la prenda ha llegado de parte de mujeres mastectomizadas y transexuales, encantadas con los pedúnculos falsos. Skims ha aclarado que un 10% de los beneficios de este peculiar producto se destinará a One Percent for the Planet, una organización sin ánimo de lucro que persigue, como su nombre indica, que las grandes corporaciones entreguen un dólar de cada 100 que ganen a causas medioambientales.

Una estrategia de marketing casi tan engañosa como los pezones que vende, pues Kim Kardashian aparece de las primeras en la lista de famosos con una mayor huella de carbono, un ránking confeccionado basándose en la enorme cantidad de vuelos que realiza al cabo del año en su 'jet' privado. Con la calefacción a tope que está refrescando, y quién quiere marcar estilo al natural si dispone de tan novedoso corsé.

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