Más allá del Mobile

Durante la próxima semana se celebra en Barcelona una nueva edición del Mobile World Congress (MWC). Se esperan más de 80.000 asistentes de todo el mundo, más de 2.000 exhibidores y miles de empresas del sector digital.

Los beneficios para la ciudad durante esta semana son evidentes en términos de un aumento del consumo del sector servicios, desde restaurantes a hoteles pasando por muchas actividades comerciales.

En la etapa histórica resultado de la revolución industrial, las Grandes Exposiciones y las Ferias de Muestras reunían a los distintos sectores para darse a conocer, contactar con nuevos mercados y conocer algunas novedades del sector.

En el nuevo escenario del siglo XXI, ¿cómo se pueden aprovechar estos acontecimientos en beneficio de todos los ciudadanos durante todo el año? En el caso del MWC, la respuesta la tenemos en la figura de la Fundación MWC, que tiene por finalidad promover la transformación digital de la economía y la sociedad. Esta fundación, participada por el sector público y el privado, actúa en la capacitación digital de profesionales y ciudadanos, la transformación de industrias y servicios y la promoción del emprendimiento digital.

Actualmente, la Barcelona metropolitana es escenario de una gran dinámica de empresas tecnológicas de muchos sectores, tanto emergentes como en fase de crecimiento, propiciada por su capacidad de atracción de talento internacional y por la existencia de universidades y de centros de I+D que configuran un ecosistema innovador en crecimiento que va aumentando su complejidad.

Algunas multinacionales hace tiempo que eligen la ciudad como el lugar donde situar sus ‘hubs’ tecnológicos o unidades de desarrollo que dan servicio al conjunto de la empresa. Este sector ha tenido un fuerte desarrollo durante los últimos años, debido al atractivo de la ciudad para el talento internacional.

Otros ‘hubs’, promovidos por las administraciones públicas, van jugando un papel relevante en algunos sectores, como la reciente inauguración del llamado Pier 07, situado en un edificio de la Via Laietana de Barcelona dedicado al sector Biotec. Por otra parte, gran número de empresas emergentes ocupan distintos espacios urbanos situados en pisos y ‘coworkings’ distribuidos por el Eixample y el Distrito 22@.

En general todos ellos, ‘hubs’ y empresas, se ubican de forma dispersa en la trama urbana de la ciudad, pero desconectados, sin actuar conjuntamente como un auténtico ecosistema innovador, donde el todo sería muy superior a la suma de las partes.

El reto planteado para los próximos años es doble. Primero, cómo el ecosistema innovador de la ciudad aumenta su dimensión y su complejidad, y segundo, cómo este proceso se desarrolla evitando situaciones de gentrificación hoy presentes en muchos barrios de la ciudad.

Demos pues la bienvenida a esta nueva edición del MWC pero trabajemos durante todo el año para reforzar el ecosistema innovador.

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