Rivera, Casado y Franco

Según leo, señor Rivera, su currículum pierde y gana un doctorado y dos másteres. Se ve que fue un error de transcripción de dictado, de imprenta, de imaginación o de ensoñación. El caso es que, de su trayectoria académica, se han caído dos másteres y un doctorado y luego reaparece un doctorado. Dice que es doctorando en la UAB y la universidad le desmiente. Bueno, son cosas que pasan. Hay veces que, con la vida que llevamos, uno no sabe si es doctor o paciente.

Seguramente dirá usted que lo que se ha publicado no se corresponde con la realidad. Es porque la gente y las redes sociales forman un tándem maligno. Menos mal que los políticos siempre velan por la verdad, la objetividad, la ponderación, la equidad y la mesura.

Observo que usted tiene la lícita ambición de ser presidente del Gobierno y que para conseguirlo no tiene complejos, pero sí quizá una cierta urgencia y apremio. Lo mismo quita lazos amarillos, que provoca elecciones en Andalucía, que acusa al presidente Sánchez de una tesis doctoral malnacida y prostituta. Cómo sufre señor Rivera, con tanta injusticia. Por si fuera poco, estos laboristas, colectivistas y autogestionarios de la izquierda, quieren exhumar la momia de Franco. Ciudadanos y el PP se han abstenido, por el respeto debido a los dictadores difuntos y su eterno descanso.

Lo suyo, señor Rivera, es irrepetible. Son ustedes la fuerza más votada en Catalunya con votos prestados de distintos partidos políticos, entre otros del PSC, y en España votan contra la exhumación del inhumano.

Mire si es usted hombre cabal, que le preguntó por su tesis a Sánchez, alterando las normas del Parlamento.  Y eso que tan dolorosa le resulta la alteración reglamentaria en el Parlament de Catalunya. Debió de ser durísimo para usted, saltarse el artículo 80 del reglamento de Congreso, y cambiar la pregunta. Un patriota.

Lo malo de estos socialistas 'sans-culotte' y masones es que sus ministros dimiten con celeridad y Sánchez hace pública su tesis doctoral. Todo para dejarles a usted y al señor Casado sin argumentos. Hay que ver cómo son, señor Rivera. Lo hacen con toda la intención.

Mire lo bien que se lo pone, en cambio, el señor Casado, que tiene su máster bajo sospecha y el, diligentemente, no lo enseña. Eso es actuar como se viene haciendo toda la vida. La jueza ha elevado el máster al Supremo, pero Casado dice que ha prescrito. Esto son argumentos.

Otra cosa que les une a usted y al señor Casado es la petición de aplicación del 155 cada cuarto de hora. ¿Por qué no funden sus dos partidos y se ahorran dolores de cabeza? Al final necesitaremos un máster para aguantarles a ustedes.