La clave

La salida de Iceta

juancho
Dumall

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La propuesta de Miquel Iceta de que el PSOE pueda favorecer la investidura de un candidato del PP que no sea Mariano Rajoy no debería ser tomada como la declaración fuera de registro de un barón periférico en plena sequía informativa de agosto. Porque el planteamiento del secretario general del PSC coincide con la sensibilidad de parte de la dirección socialista (los partidaros de vender la abstención a un precio alto) y porque saca al PSOE de la tozudez del no es no.

Seguramente influido por la salida in extremis del bloqueo político en Catalunya tras las elecciones autonómicas de septiembre del 2015, Iceta pone sobre el tapete una propuesta similar a la de la CUP a Junts pel Sí: si queréis nuestro voto, cambiad de candidato a presidente. Los anticapitalistas consideraban a Artur Mas el máximo responsable de la corrupción en torno a Convergència y de los recortes de la Generalitat en las áreas sociales más sensibles. A eso se agarró la CUP para forzar, cuando ya iba a sonar la campana de una repetición de elecciones, la renuncia del hasta entonces president. La ultraizquierda no echaba a pique la hoja de ruta independentista, pero a cambio se cobraba una cabeza de la máxima relevancia.

Relevo en el PP

¿Puede ocurrir eso ahora con la persona de Rajoy? Es muy dudoso, por más que el actual presidente en funciones sufra la angustia de un revolcón en la primera sesión de investidura y vea acercarse la posibilidad de unas terceras elecciones. La diferencia es que, mientras Convergència temía como a una granizada una nueva cita con las urnas, el PP parece seguro de que el castigo en el caso español sería para sus adversarios. Por otra parte, nadie en el PP parece dispuesto a forzar un relevo que abriría no pocas costuras en la organización, sometida a unos complejos equilibrios internos de poder.

Ahora bien, la propuesta de Iceta, ninguneada hasta ahora por el entorno de Pedro Sánchez, trata de descargar de presión al PSOE ante la que se avecina y de pasar la pelota al tejado del PP. Lo que está por ver es si este váyase, señor Rajoy va a ser entendido por una mayoría social que quiere una solución ya.