Caerse del guindo en Rusia
Marc Marginedas
Periodista
Premio 'Cirilo Rodríguez' al mejor corresponsal en el extranjero (2013), Premi Nacional de Comunicació (2013) y Premio Luka Brajnovic de Periodismo (2019). Autor de 'Periodismo en el campo de batalla: 15 años tras el rastro de la yihad'. Protagonista del documental 'Regreso a Raqqa' (2022)
MARC MARGINEDAS
Vasily Kolmogorov ocupó el cargo de vicefiscal general de Rusia hasta el 2004. Su oronda figura, donde predominan las líneas dionisíacas sobre las apolíneas, colmaba con generosidad el uniforme azul intenso que debe vestir el número dos del órgano judicial más poderoso de la Federación Rusa, con competencias como el lanzamiento de casos criminales en nombre del Estado.
Kolmogorov, a mitad de mandato cuando la fiscalía comenzó las primeras investigaciones del caso Yukos, se le conocía por su tendencia al acaloramiento. Antes de viajar entonces a España para pedir la extradición de otro magnate, Vladímir Gusinski, propietario, en ese momento, de la contestataria cadena NTV, y perseguido, al igual que Mijail Jodorkovski, tras la llegada de Vladímir Putin al poder, el verbo suelto de Kolmogorov acabó por pasarle factura: «Si hubiésemos tenido tanta fuerza como dicen, esa NTV no existiría ya; habríamos desconectado el interruptor, y se acabó», declaró en una lapidaria entrevista a un diario madrileño y a EL PERIÓDICO. Kolmogorov llegó a presentarse en Madrid para presionar a Baltasar Garzón, pero la Audiencia Nacional negó la extradición pedida por Moscú.
Gobiernos e instancias judiciales internacionales coinciden en estos días -en los que se acusa a Rusia de responsabilidad indirecta en el derribo del Boeing 777 malasio- en reactivar investigaciones, o en emitir sentencias que ponen en entredicho a la cúpula política y judicial rusa. Marina Litvinenko, viuda del exespía Aleksandr Litvinenko, envenenado con polonio-210 en el 2006, acaba de recibir con alborozo la noticia de que Londres abrirá una encuesta pública sobre la muerte de su marido. Hace un año y medio, otro Ejecutivo, encabezado también por David Cameron, maniobraba para excluir de las pesquisas material sensible, argumentando «interés público».
No parece probable que ningún ministro británico o juez del Tribunal Permanente de Arbitraje sea capaz de las torpezas o los excesos verbales del vicefiscal de Rusia en los 90. Pero este repentino interés en los temas rusos rememora, cuando menos, a ese aluvión de casos contra oligarcas de hace década y media en Moscú. Como si la comunidad internacional acabara de caerse del guindo, descubriendo que en el Kremlin se instaló una dictadura represora, capaz de todo por prevalecer.
- Esto es lo que más mira Hacienda este año de tu declaración de la renta
- La Generalitat dará 15.876 euros a los catalanes menores de 30 años que se den de alta como autónomos
- Barcelona retoma el reto de brindar por fin a la Sagrada Família su escalinata
- En estas localidades de Catalunya también es festivo este lunes, día de la Segunda Pascua
- El agujero de la orientación escolar: 'Me costó mucho encontrar apoyo para hacer FP; como mis notas no eran malas creían que era una pérdida de talento
- El pantano de Talarn llega al máximo de su capacidad y empieza a desembalsar agua
- Albiol deja en la calle a los ocupas de uno de los edificios de Badalona desalojados tras el derrumbe mortal
- Supervivientes 2024': Javier expulsado y Blanca y Marieta regresan a la lista de nominados