Anatomía del audiovisual

El precio de ser mirado: de 'Shoah' a OT y las entrevistas de Oprah Winfrey

Jordi Balló y Mercè Oliva analizan en ‘La imagen incesante’ la presencia de los formatos y dispositivos audiovisuales y cómo conectan con las tensiones del mundo actual

Una escena del popular programa de entrevistas de Oprah Winfrey con Will Smith de invitado.

Una escena del popular programa de entrevistas de Oprah Winfrey con Will Smith de invitado. / EPC

Quim Casas

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Los formatos son puentes por donde circulan las imágenes a la búsqueda de interlocutores. Así definen Jordi Balló y Mercè Oliva los formatos audiovisuales en su reciente ensayo ‘La imagen incesante’, publicado por Anagrama. Los formatos son mutantes y adaptables. Proponen los autores otra aproximación: el formato audiovisual es un conjunto de reglas que genera una repetición narrativa, es algo que circula, se repite y transforma. Para realizar su anatomía de los formatos audiovisuales –así se subtitula el libro–, quirúrgica y fluida, Balló y Oliva han acudido a muchos ejemplos: series, concursos, programas culturales, películas, documentales, ‘talk shows’, telerrealidad, ‘talent show’, programas de cocina, ‘true crime’ y redes sociales.

El relato y el discurso son apasionantes. Balló explica que una de las premisas del ensayo es la de “que, a través de los formatos, podemos plantear debates contemporáneos”. El universo audiovisual de nuestro tiempo genera multitud de sinergias, pero también de dudas ante la imagen filmada, grabada o capturada. El libro es el resultado de una labor paciente. Primero crear los conceptos y después buscar los ejemplos más precisos para vestirlos. Con un estilo muy flexible que permite pasar “de ‘Shoah’, la gran película sobre el Holocausto judío, a ‘Rocío, contar la verdad para seguir vista’, un formato híbrido de Telecinco con Rocío Carrasco, y al mismo tiempo hablar del programa de entrevistas de Oprah Winfrey o de espacios de la televisión pública”, apunta Olivia. Entre ellos, uno de la televisión danesa de 2014 en el que dos hombres cisgénero experimentaron en directo el dolor de las contracciones de un parto gracias a un cinturón de impulsos eléctricos colocado en su abdomen.

Empezaron a escribirlo en 2019. Llegó después la pandemia. Superado ese bache en la relación y las comunicaciones –también en la producción audiovisual, que extrajo otros réditos–, los autores decidieron con buen criterio que todo lo escrito reposara, pues la tentación de verter determinadas consideraciones tras un larga confinamiento era peligrosa. El libro, pues, ve la luz habiendo tomado suficiente distancia sobre todos aquellos acontecimientos que han marcado los últimos años de nuestras vidas como consumidores de formatos.

“Los formatos son estructuras que construyen lenguajes, vehiculan imágenes y significados”, nos comenta Oliva. “Lo que hemos aprendido”, apunta Balló, “es que los formatos se definen también en su capacidad generativa”. “Si la estructura es lo que vehicula un significado, las reglas marcan el lenguaje: reglas que marcan lo que hacen los participantes de determinados programas y que guían el lenguaje audiovisual”, subraya Oliva.

En uno de los capítulos de ‘La imagen incesante’ se habla de la crisis del relato único que proporcionó, en 1988, el documental de Errol Morris ‘The thin blue line’, que el director empezaría a realizar para esclarecer un difuso caso criminal. Morris desveló errores judiciales y falsos testimonios y, tras el estreno del filme, el condenado a muerte fue exonerado y liberado. Balló y Oliva lo consideran uno de los documentales más importantes de la historia del cine. 

Este género está muy presente en el libro, en todas sus acepciones. Balló hace hincapié en un pasaje muy interesante que concierne al filme ‘La flaca Alejandra’ (1994), codirigido por Carmen Castillo, quien fue detenida y torturada durante la dictadura chilena. En el filme se enfrenta con Marcia Merino, conocida por el apodo que toma como título la película, que también fue torturada y acabó delatando a algunos de sus compañeros de militancia: es un enfrentamiento en el que cada una quiere conocer los motivos y el destino de la otra.

¿Hasta qué punto un ‘reality’ es un documental o una realidad construida? Los formatos se expanden. Balló recalca que alguien como el británico Stephen Lambert, “el productor de ‘Wife swap’, el programa sobre una mujer que cambia de familia, producido por una televisión pública pero con un claro dispositivo de entretenimiento, sea también el productor de Adam Curtis”, cuyos documentales (‘El siglo del individualismo’, por ejemplo) expresan opiniones realmente contundentes sobre cuestiones sociales y políticas.

En el apartado titulado ‘El precio de ser mirado’, los autores reflexionan sobre una situación acontecida en ‘Operación Triunfo’, en la emisión del 12 de noviembre de 2018. Los concursantes se encontraron con un papel colgado en la puerta de su habitación en el que se les decía que la estancia se abriría media hora más tarde de lo previsto para su descanso. La conclusión es que debían generar contenido durante media hora más de tiempo del estipulado, y decidieron protestar tumbándose frente a la habitación y simulando que dormían. 

Es una protesta laboral en toda regla que sorprende debido al contexto en la que se produce. “Tanto ‘Operación Triunfo’ como ‘Máster chef’ o ‘Euforia’ nos hablan del mundo del trabajo contemporáneo a través de gente que quiere ser cantante o cocinera, que quiere dedicarse a trabajos creativos, una fábula un poco idealizada”, explica Oliva. “Pero al mismo tiempo”, prosigue, “mientras concursan están trabajando, crean contenidos que tienen un valor económico. En este fragmento concreto se dan cuenta de que han de trabajar media hora más de lo estipulado y deciden parar. La reacción de los responsables del ‘talent show’ fue muy fuerte, ya que habían puesto en duda las reglas del programa”. Dice mucho de los imaginarios laborales actuales, sin cuestionar nunca las normas.

Balló y Oliva no establecen un canon de los mejores formatos televisivos. La idea es ver como estos espacios, documentales y dispositivos, tratados todos por igual, conectan con debates, imaginarios y tensiones del mundo contemporáneo.

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