Cierre de una sala histórica

El cine Comedia se despide de sus fieles y supervivientes: "Sentimos pena y miedo por ver en qué se convertirá"

El edificio del cine Comedia no podrá destinarse a usos comerciales, según la normativa de Barcelona

"Quedamos en el Comedia", Barcelona pierde otra brújula ciudadana

Cierra el Comedia, la última sala de lo que fue la arteria cinematográfica de Barcelona

Alba Giraldo

Alba Giraldo

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El cine Comedia ha levantado la persiana por última vez este domingo 14 de enero sobre las cuatro de la tarde. Las máquinas de palomitas han explotado los últimos granos de maíz, las pantallas han reproducido las últimas películas y los nostálgicos han ocupado las butacas en las que vivieron momentos felices de su juventud a modo de despedida. El histórico cine, con cinco salas, se ha despedido de Barcelona este fin de semana siendo el último local en resistir de la zona. 

Durante muchos años, muchas personas quedaban expresamente en la esquina de paseo de Gràcia con Gran Via para pasar tardes de cine. "Tenemos pena y miedo por ver en qué se convertirá", expresan algunas barcelonesas que han querido despedirse del lugar en el que pasaron tantos momentos. "Lo sentimos mucho porque es la historia de nuestra vida", apunta una de las personas que se han acercado al cine este domingo para despedirse.

Aunque el cine no ha conseguido agotar todas las entradas de sus sesiones durante esta última tarde, la afluencia en todas las películas de la jornada ha sido continua. "A nivel de cultura se están haciendo las cosas muy mal. En otro país, un cine así no cerraría nunca", critica Albert Artés, uno de los asistentes que lamenta el cierre de una sala a la que acudió durante muchos años.

Futuro incierto

La historia del Comedia se explica a través de sus trabajadores. Paqui Moreno, la limpiadora del Comedia, lleva 30 años trabajando en las salas. "Todo cambió a partir del covid. Me da pena porque antes era mi casa, pero ya no lo es", expresa. Como ella pertenece a una empresa externa de limpieza, su futuro ha quedado en el aire. Mientras que sus compañeros serán despedidos y recibirán una indemnización, ella todavía no sabe dónde tendrá que ir a trabajar este mismo lunes. 

Por su parte, Víctor Baldoví, proyeccionista en el Comedia desde 1997, lleva tiempo visualizando el cierre de los cines. De hecho, él mismo escribió un guion en el que imaginaba que unas salas bajaban la persiana y todos los trabajadores se ponían en huelga para impedirlo. En este caso, los integrantes del local de paseo de Gràcia no prevén encerrarse en el interior para impedir el cierre. A pesar de su despedida, Baldoví asegura que los cines han seguido funcionando y reuniendo público durante estos años.

La historia del proyeccionista con la sala va más allá de su implicación profesional. Empezó a acudir al Comedia por una chica. Ella siempre acudía al mismo cine y las mariposas en el estómago le empujaron a acompañarla. Siempre se sentaban en la misma butaca: la tercera fila de la sala 1. "Yo decía: 'Es muy cerca, no veo nada'. Pero por amor aguantas". Esas citas se acabaron convirtiendo en una bonita relación. 

El cine Comedia cierra sus puertas tras 40 años de historia

El cine Comedia cierra sus puertas tras 40 años de historia / MANU MITRU / VÍDEO: EUROPA PRESS

Edificio histórico

El edificio fue construido entre 1887 y 1890 para convertirse en la residencia particular del político y empresario Frederic Marcet, el Palau Marcet. Tras la Guerra Civil, en 1941, se adaptó a Teatre de la Comedia, con platea y dos pisos de palcos, con capacidad para 1.246 espectadores. En 1960 renació como cine, conservando gran parte de su aspecto hasta que la demanda le obligó a optimizar su espacio y abrir nuevas salas.

La cadena de cines Yelmo adquirió la sala en 2017, tras una primera amenaza de cierre por la crisis de asistencia de público que había llevado a su anterior empresa explotadora, Espectáculos SL, a presentar un concurso de acreedores. Sin embargo, la pandemia del coronavirus y las restricciones volvieron a ponerla en apuros. En los últimos años, las plataformas han matado al cine y el público se desplaza a las salas para grandes eventos como 'Barbie'. Incluso en esos casos, es más común ver los cines ocupados en establecimientos de gran superficie como centros comerciales.

Todavía no se conoce el destino del inmueble. La propiedad siempre se ha mostrado dispuesta a preservar su futuro como equipamiento cultural y no comercial, por lo que no está previsto que la superficie construida se convierta en una tienda. Los trabajadores esperan que, en poco tiempo, otra cadena pueda alquilar el edificio y retomar su funcionamiento como un cine

'Los que quedan', 'A fuego lento', 'Aquaman y el reino perdido', 'Ocho apellidos marroquís' y 'Napoleón' han protagonizado la cartelera final del Comedia. Pero la película que ha cerrado las puertas del cine para siempre ha sido 'Wonka', a las 21.40 horas. Igual que Willy Wonka soñó algún día con abrir su tienda de chocolate en las Galerías Gourmet, el Comedia fue el sueño de alguien hace muchos años. El proyector se apaga, pero los momentos compartidos en sus salas vivirán para siempre en la memoria de todos los barceloneses.

Suscríbete para seguir leyendo