En el Teatre Coliseum

Natalia Osipova, la estrella del Royal Ballet, debuta con su compañía en Barcelona: "Ahora una bailarina puede seguir hasta los 50"

Osipova brilla en una galaxia de primeras figuras

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Natalia Osipova.

Natalia Osipova. / EPC

Marta Cervera

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Natalia Osipova (Moscú, 1986), la gran estrella del Royal Ballet, viene por primera vez a Barcelona con su propia compañía Bloom Dance Project creada con su esposo, el también bailarín y coreógrafo Jason Kittelberger.

¿Qué incluye el repertorio?

Evidentemente hay obras clásicas en el programa porque es lo que la gente quiere ver. Habrá un paso a dos de 'Corsario' de Marius Petitpa que es muy dinámico donde bailaré con Giorgi Potskhishvili, recientemente promovido a bailarín principal del Dutch National Ballet, que pronto será una gran estrella, que baila por primera vez en Barcelona. Tiene una fantástica energía y carisma. Sus saltos y giros son impresionantes. También está prevista su famoso solo de 'La muerte del cisne', una pieza muy famosa con música de Saint-Saëns y quizás haremos una pieza que Alexei Ratmanski que creó para mí, 'Valse Triste'.

También habrá habrá algo de neoclásico y danza contemporánea.

Por supuesto. Incluiré una obra de Roy Assaf, coreógrafo de la que soy gran fan: 'Six years later'. Es una muy bella y muy dramática que bailo con mi marido que habla de una pareja tiene sus más y sus menos. Nos encanta bailarla juntos. Y haré un nuevo dueto, de otro coreógrafo israelí. Me encanta Ohad Naharin y es una pieza que sigue su estilo de danza creada el joven coreógrafo Shahar Binyamini que fue bailarín de Batsheva Dance Company. En un estilo muy diferente que nunca he bailado que haré con Josef Kudra.

¿Habrá más sorpresas?

Habrá una segunda 'première' creada por mí y Jason con música de Chaicovski de 'La bella durmiente' que indaga en el sueño de Aurora con el príncipe. 'Her dream', así se llama la pieza, no es completamente clásica pero saca partido de mis recursos en el ballet. Y estará con nosotros en Barcelona Daria Pavlenko, gran bailarina rusa del Mariinski que pasó a bailar con la compañía de Pina Bausch. Tiene una madurez extraordinaria y sigue bailando más allá de los 40.

Como usted, ella se ha pasado a la contemporánea. Pero usted sigue bailando clásico.

Antes a los 35 o 37 máximo te tenías que retirar. Ahora es distinto. Si estás bien y quieres seguir bailando, puedes. Las vitaminas, el Pilates y la fisioterapia ayudan. Si tienes fuerza y energía puedes seguir hasta los 50. Has de proponérselo y trabajar duro. Desde luego, no vas a bailar roles como el de Julieta pero hay tantas coreografías y material que tu carrera puede seguir.

Tamara Rojo lo demostró en el Liceu bailando la 'Giselle' de Akram Khan.

¡Exacto! Tamara se pasó a la dirección y actualmente está al frente del Sant Francisco Ballet pero si quisiera podría seguir bailando. Lo importante a es no tener lesiones y mantener la disciplina.

¿Qué cambios aprecia en su manera de bailar desde sus commienzos hasta hoy?

Cuando empiezas estás muy influenciada por lo que te dicen pero a medida que te desarrollas como bailarina vas encontrando tu propia voz. Tras interpretar tantas obras, descubrir a tantos coreógrafos y trabajar en muchos teatros sé lo que quiero. La danza es mucho más que hacer 'abrabesques' perfectos, lucir preciosa e impresionante. La danza es amplísima y me encanta la contemporánea y el tango.

¿Se siente a gusto con la danza contemporánea?

No soy la mejor bailarina contemporánea porque vengo de la clásica pero no lo hago mal. Intento hacerlo siempre lo mejor que puedo y he evolucionado. Me doy cuenta cuando miro vídeos de hace seis años. Una bailarina clásica no se mueve igual que una de contemporánea.

¿Cuál es la principal diferencia?

En la danza contemporánea hay estilos muy diferentes. La fluidez de las piezas de Sidi Larbi nada tiene que ver con el estilo 'Gaga' de Ohad Naharin o el estilo de Jiri Killian. Este último es más académico.

Por cierto, ¿cómo surgen las piezas que firman conjuntamente con su marido Jason Kittelberger?

Él tiene más experiencia coreografiando el movimiento. Yo me centro más en las ideas de la pieza, la parte narrativa y la música.