Nuevo formato de humor

'Roast', el arte de insultar a un amigo

El legado de Eugenio, visto por la nueva escena catalana de comedia 'stand up'

La comedia en catalán respira en un ecosistema joven y paritario (y emancipado de la música)

Charlie Pee, a la derecha, escucha como Joel Díaz, de pie, la 'asa' en el Roast con el que celebraba sus 10 años en la comedia

Charlie Pee, a la derecha, escucha como Joel Díaz, de pie, la 'asa' en el Roast con el que celebraba sus 10 años en la comedia / Júlia Ruiz (eyesssence)

Ignasi Fortuny

Ignasi Fortuny

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"La violencia verbal ajena nos atrae. Y si esa violencia verbal está bien estructurada, controlada y está hecha con intención cómica, es un producto de entretenimiento guay. Y sin las consecuencias negativas que acostumbra a tener". Dice esto el cómico Joel Díaz, miembro del pódcast 'La Sotana' y de varios programas de Catalunya Ràdio, que este viernes por la noche se pone en medio del escenario -o llamémosle por una vez diana, o cazuela, verán- del Casino de L'Aliança del Poblenou para recibir perdigones de fuego amigo.

Eso vendría a ser el 'roast', un formato humorístico relativamente poco extendido por aquí debido a su carácter especial, de espectáculo único, como el que protagonizará Díaz programado dentro del primer festival Cruïlla Comèdia (y para el que se ha vendido todo el papel). Aquí se viene a poner a caldo a un personaje, pero cara a cara, no chismorreando en la máquina del café del trabajo, tampoco haciendo el 'troll' en Twitter. Ah, y con el beneplácito del protagonista, pues hay tanta complicidad como ingenio y, sobre todo, mala leche. Porque el arte de insultar merece ser aplaudido.

Evidentemente, el elenco y la química entre ellos marca buena parte del éxito del 'show'. En este caso, Díaz estará rodeado por amigos y compañeros del gremio que tratarán de 'asarle' a base de reírse de él (el formato también puede verse en uno contra uno, dos contra dos...). Y él, ojo, tiene derecho a réplica. "Es mi formato de comedia favorito. Me parece un formato de máxima confianza y amor con tus amigos, insultarse con chistes diciéndote las cosas que más dolor te hacen a la cara", expone Charlie Pee, cómica que recientemente se organizó un 'roast' a ella misma para celebrar sus 10 años en escena. Un homenaje particular. "Yo soy una persona que cuando me pasa algo malo me río de ello. Y que mis amigos se rían o hagan broma me ayuda a estar mejor", añade la cómica catalana. Esto enlaza perfectamente con lo que opina el guionista Oriol de Balanzó ('La Competència' de Rac-1), director del Cruïlla Comèdia, que apunta que "tiene un punto catártico, de limpieza espiritual".

Joel Díaz este viernes se ha colocado en el centro de la cazuela -"a ver, si no fuese a cambio de dinero, no lo haría, eh"- para ser 'asado' por seis colegas cómicos (Andrés Fajngold, Joan Ferrús, Maria Lablanco...) pero, de hecho, una de las gracias del 'roast' es que parte con un protagonista, pero aquello puede explotar hacia todas las direcciones. "En realidad, no hay nadie en el centro, porque todo el mundo se insulta con todo el mundo", desliza Charlie Pee, que colabora también en programas como 'La Resistencia' (Movistar+). La cómica -y los otros que aparecen en esta página- quiere dejar clara una cosa: "No nos gustar ver a nadie mofarse de otro, sino que en un 'roast' nos reímos todos con todos, con nuestras desgracias. Mofarse es reírse sin el consentimiento de la otra persona".

Despedazar a un personaje popular

Este formato humorístico, importado de los Estados Unidos, donde hace varias décadas que funciona (con personajes tan populares como Charlie Sheen o, ojo, el mismísimo Donald Trump en el centro del ring), y que en España ha tenido apariciones puntuales en televisión a través, sobre todo, del canal Comedy Central, propone un espectáculo fresco, que puede parecer improvisado (no lo es), y que el espectador puede llegar pensar que se ha colado en medio de un grupo de amigos en crisis que está probando alguna hilarante terapia.

"Como se hace de manera brillante y divertida te sientes partícipe de este momento de punk inteligente", aporta De Balanzó. Según el director del Cruïlla Comèdia, este formato dice mucho del "umbral humorístico de la sociedad". "Lo guay del 'roast' -añade el director del Cruïlla Comèdia- es ver cómo el otro lo encaja con deportividad. El 'roast' es humor inteligente, aunque también puede ser totalmente macarra y sucio".

Y a eso último va también Díaz, sentenciando que "el motivo por el cual triunfa es por el mismo morbo que nos empuja a interesarnos por cualquier conflicto que vemos por la calle o la tele". En palabras de Charlie Pee, 'asada' hace poco menos de un mes en la sala Paral·lel 62 por una decena de colegas (entre los que se encontraba el propio Díaz, Manel Vidal o Carolina Iglesias), "tiene éxito porque a la gente le gusta ver cosas que ellos no se atreven a hacer". "Escandaliza al mismo tiempo que hace reír. Vamos a ver algo que no sabemos qué pasará y puede ser muy bestia", zanja la humorista.

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