A partir del 20 de abril

El Liceu acoge una 'Manon' con aires de musical

La producción de Olivier Py moderna, sensual y siniestra, cuenta con dirección musical de Marc Minkowski y un gran reparto

Marta Cervera

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Sensual, siniestra, moderna y con aires de musical. Así es la 'Manon' de Jules Massenet (1842-1912) en la aclamada producción de Olivier Py que llega al Liceu acoge a partir del próximo día 20 con dirección musical de Marc Minkowski y un gran reparto. Está liderado por Nadine Sierra y Amina Edris en el primer y segundo reparto respectivamente en el rol de Manon y con Michael Fabiano y Pene Pati en el del caballero Des Grieux. Completan con un reparto formado por los barítonos Alexandre Duhamel y Jarrett Ott, en el papel de Lescaut, mientras que como Conde Des Grieux tiene a Laurent Naouri y Jean-Vincent Blot.

Las once funciones previstas hasta el 3 de mayo estarán dedicadas a la soprano barcelonesa Victoria de los Ángeles con motivo del centenario del nacimiento de la artista que bordó de el rol Manon. Nunca sabremos qué habría pensado ella de esta ambiciosa producción que juega con el erotismo y la sordidez, en el límite entre lo grotesco y el burlesque. Para Víctor Garcia de Gomar, director artístico del Liceu, marca "un nuevo canon", ha dicho en referencia a la actualizada puesta en escena que impacta con neones rojos de burdeles y sus habitantes, bolas de cristal discotequeras y una la ruleta de la fortuna giratoria, entre otros.

Amor y muerte

La ópera se basa en la novela del abate Prévost 'Manon Lescaut' (1731), una historia aleccionadora sobre una chica joven que en una parada en su camino hacia el convento se enamora a primera vista del joven De Grieux y huye con él a París. Sin embargo la oposición de la familia por un lado y las ganas de libertad, por otro, harán que acabe dejándose llevar por el lujo y el disfrute de la buena vida junto a acaudalados hombres que pagan por sus caprichos. Cuando se da cuenta de su error y quiere recuperar a Des Grieux es demasiado tarde. Manon acabará sucumbiendo ante un mundo cruel, lleno de hipocresía y avaricia.

Durante la rueda de prensa en el Liceu se ha podido comprobar la buena sintonía que hay entre la pareja protagonista del primer reparto, ambos norteamericanos. Aunque seguro que existe también en el segundo ya que Amina Edris y Pene Pati están casados. Para el tenor Michael Fabiano es su quinta producción. Para la soprano Nadine Sierra, que cantó 'Lucia di Lammermoor' en su última visita al coliseo, esta es su segunda 'Manon' tras debutar en el rol en la misma producción antes del covid. Más allá del desafío vocal que supone, Manon es para ella "una mujer que descubre demasiado tarde que lo importante en esta vida no es la apariencia, el dinero o el lujo sino el amor".

Fabiano, que cantó esta temporada en 'Tosca' y recibió la llamada del Liceu hace un mes para sustituir a Javier Camarena como Des Grieux, ha agradecido la confianza depositada en él. "Camarena tiene un talento excepcional pero como todo cantante tiene derecho a decir que no está preparado para asumir un rol. No hay que olvidar que tomamos decisiones con años de antelación y a veces no sabes qué puede ocurrir. Cuando tenía 27 años me propusieron cantar 'Don Carlo' a los 32. Y lo hice. Pero otros roles como el de Manrico de 'Il trovatore', por ejemplo, lo tuve que rechazar porque no me sentía preparado".

"'Manon' es una obra maestra, la apoteosis de la sensualidad y del arte francés"

— Marc Minkowski

La historia de Manon podría ser la de cualquier chica inocente que acaba "convertida en un juguete roto", ha recordado Minkowski. Para el director musical la partitura de Massenet es "una obra maestra, la apoteosis de la sensualidad y del arte francés que ofrece el camino para avanzar hacia Puccini", ha declarado. El compositor italiano estrenó 'Manon Lescaut' en 1893, casi diez años después de que la ópera de Massenet subiera por primera vez a escena el 19 de enero de 1884. En España la obra del compositor francés se estrenó el 29 de diciembre de 1894 en el Gran Teatre del Liceu.

Minkowski que conoce bien a la Orquesta del Gran Teatre del Liceu que el año pasado dirigió con la trilogía Mozart-Da Ponte está encantado de volver a trabajar con la formación. Más allá de su "flexibilidad" ha destacado su capacidad para "tocar ligero y saber dialogar con las voces". Y ha alabado especialmente la labor de su concertino, Kai Gleusteen.