Cita con el cómic y la cultura japoneses

El Manga Barcelona planta cara al covid con una edición presencial

El salón abrirá puertas este viernes con las entradas agotadas, ajustes de aforo y la ausencia física de autores japoneses, que se conectarán en 'streaming'

El festival presenta una variada programación con muchos imperdibles

Aficionados en el Manga Barcelona de 2019.

Aficionados en el Manga Barcelona de 2019. / ELISENDA PONS

Anna Abella

Anna Abella

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

En 2019, 152.000 visitantes pisaban el Manga Barcelona en una 25ª edición de récord. Entonces nada hacía pensar que pasarían dos años antes de que los ‘otakus’ y cualquier amante del cómic y la cultura japoneses pudieran volver a disfrutar de un salón presencial. El covid obligó a celebrar el de 2020 exclusivamente ‘online’. Pero este viernes, 29 de octubre, y hasta el lunes 1 de noviembre, los fans del manga volverán a los pabellones de Fira Montjuïc con ansias renovadas aunque sea incorporando la obligatoria mascarilla a los populares atuendos de ‘cosplay’. Prueba de las ganas de salón presencial son las entradas para los cuatro días, que se agotaron el pasado lunes en solo unas horas. Aunque aún hay esperanza para quienes se hayan quedado sin. 

En la presentación de la programación de esta 27ª edición, Meritxell Puig, directora del Manga Barcelona, ha anunciado este lunes, junto a Oriol Estrada, responsable de contenidos, que este martes o el miércoles (lo anunciarán en redes sociales) saldrá a la venta un remanente de entradas que serán el resultado de haber terminado de solucionar las incidencias que se produjeron durante el proceso de compra (hubo momentos en que se estaban vendiendo 1.500 entradas por minuto y más de 15.000 usuarios intentaban comprarlas a la vez). Y para quien, aun así, se quede sin, podrá esperar a los días del festival: como la entrada es de un solo acceso (si se sale no se podrá volver a entrar), si alguien sale, generará una vacante en el aforo y por tanto una nueva posibilidad de adquirir el tiques, siempre en venta ‘online’ desde la web (no habrá taquillas físicas). 

Punto de vacunación

Quienes hayan podido al fin entrar podrán circular por los 70.000 metros cuadrados de los pabellones 1,2, 2.1 y 5 del recinto de Fira Montjuïc además de la plaza del Univers. Habrá un pabellón menos, el 4, que desde hace meses está funcionando como punto masivo de vacunación contra el covid; de hecho, dentro del propio salón habrá un punto de vacunación que invitará a inmunizarse a todo el que aún no lo haya hecho. 

"Se seguirá la ‘normativa covid’. No dejamos de estar en pandemia y este es un acontecimiento que reúne a mucha gente, y muchos son jóvenes que aún no están vacunados -avisa Puig-. La mascarilla será obligatoria, excepto para comer [se podrá llevar comida de casa y habrá también espacios de bar y ‘foodtrucks’]. Se velará por mantener la distancia de seguridad con circuitos de gente: se entrará a un pabellón por un lugar y se saldrá por otro para evitar cruces y se controlarán las posibles concentraciones monitorizando los flujos de público incluso con infrarrojos. Habrá diversos puntos de lavado de manos con gel… Pero sobre todo esperamos que se mantenga el sentido común porque no podemos olvidar que seguimos en pandemia". 

Los visitantes de 2019

Sin querer avanzar cifras ni cuánta gente pueden congregar, Puig augura que "es posible que se lleguen a los números de 2019 incluso con un pabellón menos". Aunque el aforo actual permitido es del 100%, la organización trabaja con un tanto por ciento algo menor "para no tener problemas y pensando en que haya el máximo de gente posible pero con todas las condiciones de seguridad". 

A causa de la pandemia, este año alcanzarán un 80% de expositores, un descenso respecto a hace dos años que se debe a que los que habitualmente vienen de Japón no van a estar, como es el espacio Nintendo, ya que las indicaciones desde el Gobierno nipón son de no ir a eventos presenciales. "Allí están una ola más atrás que nosotros y hay mucha menos gente vacunada que aquí", apunta la directora del Manga Barcelona. La obligatoriedad de hacer cuarentena cuando regresan a su país ha influido también en las ausencias físicas de los autores japoneses, que este año solo podrán disfrutarse en encuentros y conexiones ‘online’. Es el caso de las ‘mangakas’ Hirako Waka, autora de 'My broken Mariko', y Kohinata Marco ('Hei no naka no Biyoshitsu'). De forma presencial no faltarán autores españoles, como Kenny Ruiz, con 20 años de carrera a sus espaldas y triunfando en el mercado japonés.  

La programación

Actuaciones, conciertos de música tradicional, talleres de artes marciales, dibujo, de caligrafía y escritura japonesa, concursos de ‘cosplay’ y de karaoke y el Otaquiz, el espacio gastronómico con recetas y chefs, charlas y presentaciones de novedades y el rescate de la exposición que se pudo ver por el 25º aniversario, ahora actualizada con el ‘año covid’. Todo formará parte de una programación cuyos imperdibles pueden consultarse aquí y en la que también gana presencia el cine, en colaboración con Cine Asia y Filmin, con pases de películas y animes en el Auditorio del salón, entre ellos el del clásico ‘El viaje de Chihiro’, que cumple 20 años. Un festival que también se trasladará al centro de la ciudad para algunos actos en Casa Seat, en el Passeig de Gràcia.  

Pese a mascarillas, geles y distancias de seguridad el gran éxito, y el reto, será sin duda la recuperación de la presencialidad en un gran festival masivo, vislumbrando una futura vuelta a la normalidad prepandémica. Y, como augura la imagen del cartel de esta edición, obra de Carles Dalmau, en una reconocible Barcelona posapocalíptica y semisumergida en el agua, el manga regresa con la capacidad de salvar el mundo y de transmitir ilusión.