QUÉ HACER HOY EN BARCELONA

7Fun!, un nuevo centro para escalar, jugar y vivir experiencias virtuales

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Eduardo de Vicente

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Los niños estos días están revolucionados. La vuelta al cole tras las interminables vacaciones estivales siempre resulta difícil y necesitan más que nunca desahogarse, correr, saltar y entretenerse con nuevas experiencias. Hace poco más de una semana que Barcelona acoge un nuevo centro que puede hacer realidad esa aventura. Se trata del 7Fun!, un local destinado al ocio familiar (también pueden participar los adultos) que se ha instalado en el SOM Multiespai, nueva denominación que ahora recibe el Heron City.

Está situado en la primera planta frente a los cines y ocupa una superficie de 2.000 metros cuadrados dedicados al entretenimiento. Es el segundo parque de este tipo que abre esta empresa que tiene ya uno en funcionamiento en la madrileña Alcalá y tiene previsto inaugurar próximamente otro en Cornellà. El espacio ha sido diseñado por la interiorista Silka Barrio y destaca por su original vestíbulo en blanco y negro, tan elegante como divertido. Es la puerta de entrada a un mundo de sensaciones. ¡Bienvenidos!

Para empezar podemos probar con el FunnyClimb. Consiste en 18 paneles verticales para practicar la escalada a partir de los 4 años y los adultos también se pueden apuntar. Tras recibir unas breves instrucciones, los monitores nos instalan el arnés y ya podemos empezar a subir (en algunos de ellos por motivos de seguridad es conveniente utilizar casco). Encontraremos las tradicionales paredes para ir ascendiendo con divertidos colores, pero también hay otras más originales.

Por ejemplo, una de ellas tiene arriba un cronómetro para que podamos calcular cuánto tiempo tardamos en llegar a la cima y superar nuestro propio récord. Otra tiene una luz roja que te persigue y el reto consiste en llegar arriba antes de que te pille. También podemos intentar llegar hasta la parte superior para montarnos en una plataforma o saltar por unos cilindros que cada vez están más altos. Siempre vamos unidos a una cuerda que evita cualquier accidente pero, ¡atención! al cabo de un rato los peques descubren que lo más divertido no es subir… sino dejarse caer y, entonces, ya no hay quien los pare.

A continuación podemos visitar el Ninja Play, una sala para niños dividida en dos partes. A la izquierda tenemos un laberinto repleto de atracciones: toboganes, rampas, unos cilindros de plástico que pueden esquivar o golpear, varios pisos para subir, bajar, correr y sacar toda la adrenalina que llevan dentro. A la derecha, dos espacios llenos de cuadrados de espuma en los que también hay cuerdas para saltar como Tarzán en la liana, unas bolas gigantes para quedarse suspendidos, una escalera para colgarse, unas anillas o unas redes. Se les puede dejar solos porque siempre hay algún monitor que los vigila y les obliga a respetar las normas aunque no siempre les hacen caso, ya se sabe. Si no conseguimos que aquí se cansen es que es una misión imposible.

Tras tanto ejercicio nos irá bien un poco de descanso… o no, porque la siguiente atracción también tiene algo de desgaste. Se trata de la sala de máquinas de realidad virtual para adentrarse mágicamente en otros mundos. Podemos empezar probando en un par de sillas contiguas que se mueven sin parar donde hay que escoger entre nueve programas diferentes de unos 5 minutos de duración que seguiremos a través de nuestro visor. Allí nos sentiremos en una nave espacial en una aventura que recuerda mucho al desenlace del primer Star Wars pero en este artilugio no podemos disparar solo contemplar. Los niños pueden sentirse en medio de Cómo entrenar a tu dragón o probar dos ejemplos distintos de viaje por el fondo del mar.

Los más atrevidos (mejor que sean adultos) pueden subirse en la montaña rusa o el tornado para sentirse en dos atracciones de feria, cada una con dos niveles diferentes. El mareo está casi asegurado en el más complejo. Y ya los más valientes pueden probar Jinxed que es otra montaña rusa, sí, pero combinada con una especie de túnel del terror. Acabaremos dando saltos en la butaca.

Los amantes de la velocidad también pueden experimentar el vértigo de correr en la simulación de una carrera automovilística. Lo mejor es que podemos escoger el modelo de coche que queramos (Porsche, Ferrari, incluso el Aston Martin de James Bond), si queremos que sea automático, el tipo de competición en que deseamos participar (rallye, Fórmula 1, GTI, karts, etcétera) o el circuito (sí, también está el de Montmeló). Cuesta un poco controlar los mandos (volante y pedales más el visor 3D) pero una vez que tenemos la experiencia necesaria podemos retarnos con cualquiera.

Si aún no hemos tenido bastante nos subiremos a una moto futurista muy similar a la de la película Tron. Es un arcade en el que deberemos competir con otros vehículos para llegar los primeros esquivando todo tipo de amenazas. Y, sí, la moto se mueve por lo que no solo tendremos que acelerar y frenar, ya que también debemos movernos a izquierda y derecha. Tiene un tiempo determinado pero si lo hacemos bien se va prolongando.

La última experiencia de esta sala es para los que disfrutan disparando. Hay tres opciones distintas: las naves espaciales (que recuerda un poco al añorado Space Invaders pero más moderno), el militar (para sentirse en medio de una batalla de una guerra) y el más demandado, el de matar zombies. Estamos en una ciudad que parece de The walking dead y salen los muertos vivientes de los rincones más inesperados. Puedes quedarte en un rincón e irlos eliminando pero ¡cuidado! a la que te giras un poco te das cuenta de que aparecen también por los lados y nos pueden dar algún susto ya que son rematadamente desagradables.

Para acabar podemos subir a la planta superior y vivir algo más tranquilo. Allí se ha habilitado un bar y un gigantesco rocódromo al aire libre en dos espacios. El de la izquierda es más profesional y el otro para principiantes. Eso sí, siempre es recomendable ropa cómoda y debemos llevar pies de gato. Una colchoneta nos protegerá en el suelo de posibles caídas. Las paredes están repletas de lugares donde asirse y triángulos de distintos colores.

Otro de los elementos que destaca de todas estas atracciones es que siempre hay un equipo de jóvenes que nos ayudarán a evitar peligros y nos harán recomendaciones para que disfrutemos al máximo de nuestra estancia. Son unos chicos muy amables y preparados que contribuyen decisivamente a que nos lo pasemos bien y nos socorren ante cualquier problema. Y esto es solo el principio porque también acogen fiestas de cumpleaños y tienen pensado incorporar nuevos juegos virtuales y retos para todos los públicos. Un centro para divertirse 7 veces… o muchas más.