CRÍTICA DE CINE

'High life': la soledad en el espacio

El filme va más allá de la ciencia-ficción y horada caminos hasta ahora no explorados en la relación del ser humano con el espacio

Estrenos de la semana. Tráiler de 'High life' (2019)

Estrenos de la semana. Tráiler de 'High life' (2018) / periodico

Quim Casas

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Si Stanley Kubrick creó en 1968 el concepto de ciencia-ficción adulta con '2001: Una odisea del espacio', la realizadora francesa Claire Denis,Claire Denis con menos ambiciones, diseña ahora con la inclasificable 'High life', medio siglo después de aquella odisea, una ciencia-ficción poderosamente de autor, en el sentido más amplio y rico del término. Inclasificable porque a pesar de su pertenencia temática y visual al género concreto, horada caminos hasta ahora no explorados en la relación del ser humano con el espacio, además de tratar temas de raíz más ecologista, las relaciones entre padres e hijos y, sobre todo, la soledad, aspecto importante en muchos filmes de ciencia-ficción, de 'Naves misteriosas' a 'Marte' ('The martian').

El trazo de Denis en el cine europeo contemporáneo es profundo, aunque aquí lo hemos podido degustar en cuentagotas ya que apenas se han estrenado tres de sus películas anteriores: 'Una mujer de África', 'Los canallas' y 'Un sol interior', la primera y la tercera protagonizadas por Isabelle Huppert Juliette Binoche, respectivamente, las actrices francesas más inquietas a la hora de trabajar con directoras o directores arriesgados. Binoche repite en 'High life', aunque en un papel más secundario. Es Robert Pattinson, el actor que ha sabido sacudirse de encima el estigma de la saga 'Crepúsculo' trabajando con Cronenberg, Herzog y Denis, quien sostiene buena parte del peso en el papel de un astronauta aislado que ha servido de conejillo de indias para un experimento sobre la paternidad. Es un filme tan ingrávido como el espacio exterior, puntuado por la música y las canciones de Stuart Staples (líder de Tindersticks, colaboradores habituales de la realizadora), con secuencias especialmente violentas, otras de sexo agresivo, composiciones visuales desafiantes y un ritmo tan tenso como denso.