CONCIERTO

Sidonie, un nuevo fin de ciclo

El grupo barcelonés asalta por primera vez Razzmatazz en solitario en la recta final de la gira 'Sierra y Canadá'

Sidonie.

Sidonie.

JUAN MANUEL FREIRE / BARCELONA

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A pesar de su notable popularidad y de ser vecinos de la sala, Sidonie asaltarán por primera vez Razzmatazz como verdaderos protagonistas este sábado, en uno de los últimos conciertos de la gira de presentación del álbum 'Sierra y Canadá'. Marc Ros, voz y guitarra, explica el porqué de la tardanza en asaltar a solas dicho escenario: "Nos correspondía con el disco anterior, ‘El fluido García’, pero entre la crisis y que ese álbum tampoco fue de los más populares, nos quedamos sin probarlo".

'Sierra y Canadá' ha funcionado mejor, y eso que tenía su componente de riesgo: un sonido más electrónico de lo habitual, con guiños a Joe Meek y Pet Shop Boys. Al principio la reacción fue diversa. "La semana en que salió el disco, amigos como el productor Ricky Falkner nos decían que habíamos hecho un discazo. Mientras tanto, otro amigo, Gonçal Planas [cantante de Mi Capitán], nos confesaba que no veía ese discazo y no nos reconocía. Pero al final Gonçal acabó entendiendo el esfuerzo por arriesgar”.

HIMNOS COREABLES

Como en el denso 'El fluido García', Sidonie han vuelto a hacer lo que han querido, pero esta vez con la seguridad que da tener tres 'singles' en la manga: 'Sierra y Canadá', 'Un día de mierda' y 'Estáis aquí'. Esta última ha sustituido a 'El incendio' como cierre de directos. "Ya desde los primeros conciertos vimos que pasaba algo con esa canción. La gente se la hizo suya, después vino el vídeo, y ahora, lo que pasa con ese tema es algo increíble", señala el batería Axel Pi.

Según Jesús Senra (bajo y coros), estos tres 'singles' son "los temas más coreables de todo el repertorio de Sidonie. No nos había pasado nunca, la gente cantando de golpe, y a la vez, y tan alto. Y eso con canciones de un disco nuevo". 'Un día de mierda' es un excelente ejemplo de pop que trata sobre el propio pop, un subgénero que entusiasma a Ros. "¿Os acordáis de ‘Losing my edge’, de LCD Soundsystem? James Murphy va haciendo un repaso de la historia del pop en la letra. Es un melómano y te hace bailar con su obsesión. Yo lo haría en todas las canciones, solo hablaría de música".      

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