Rajoy nombra a Rafael Hernando portavoz del PP en el Congreso

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha elegido a Rafael Hernando como portavoz del PP en el Congreso. El nuevo presidente del grupo popular sustituirá a Alfonso Alonso, nombrado ministro de SanidadAlfonso Alonso a principios de mes, tras la dimisión de Ana MatoAna Mato.

Hernando figuraba en todas las quinielas de posibles candidatos, por lo que no ha habido demasiada sorpresa en el nombramiento y su elección significa dar continuidad a la labor ejercida por Alonso, puesto que Hernando era uno de los portavoces adjuntos del grupo.

El presidente también podría haberse decantado por José Antonio Bermúdez de Castro, si bien ha optado por dejar a este último como secretario general del grupo, el puesto que ha ocupado hasta la fecha, y poner a Hernando, con una capacidad dialéctica y experiencia, como imagen visible del PP en la Cámara baja en lo que resta de legislatura.

Hernando ha sido diputado durante 21 años y en la 'era Aznar' fue portavoz del PP, en concreto, coordinador de comunicación del partido. Ante el cariz electoral que adquirirá 2015 -con las elecciones municipales y autonómicas, por un lado, y generales, por otro, si es que Catalunya no adelanta también los comicios-, Rajoy se ha decantado por una persona con don de palabra, que se caracteriza por no rehuir los debates, lo que le ha costado más de algún disgusto al haber resbalado con algunas de sus declaraciones.

Rajoy ha anunciado su nombramiento en una reunión a puerta cerrada del grupo popular en el Congreso en la que han participado varios ministros y la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal. La número dos de los populares le ha precedido en el turno de palabra y ha instado a los diputados a colaborar en la difusión de que la recuperación comienza abrirse camino en España.

EL SUSPENSE, HASTA EL FINAL

El presidente del Ejecutivo ha mantenido el suspense sobre quién era el elegido hasta el final, tras 40 minutos de arenga en la que ha repasado la situación del país y, en particular, la coyuntura económica. Rajoy ha puesto sobre la mesa varios indicadores que en su opinión demuestran que, gracias a sus reformas, España ya no se encuentra en recesión, en un discurso similar al que repite en los últimos actos institucionales y los mítines de partido, según fuentes presentes en la reunión.

El dirigente del PP ha garantizado ante los diputados que sus prioridades para el último año de legislatura serán la política económica, la política social y Europa. El presidente se ha referido también al desafío independentista, para garantizar que la soberanía de España "no es negociable" y ha reiterado que no es partidario, como el PSOE, de reformar la Constitución para buscar un mejor encaje a Catalunya.

Rajoy también se ha referido a la corrupción y ha reconocido que es un problema que está haciendo mucho daño a su partido y a la política en general.