NUEVA ETAPA

PP-PSOE: Una relación poco fluida

Los populares se quejan de la dificultad de negociar con el nuevo equipo de Sánchez en el día a día y lo achacan a la falta de rodaje

Rafael Hernando y Margarita Robles.

Rafael Hernando y Margarita Robles.

P. Santos / J. Ruiz Sierra / Madrid

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En la rueda de fin de curso antes de irse unos días de vacaciones a Pontevedra, Mariano Rajoy, además de regodearse con los datos económicos en los que él basa “la recuperación de España”, se jactó de haber demostrado que sabe “pactar”. Pese a estar en minoría en el Congreso, afirmó, el PP ha encontrado la manera de ir avanzando en la legislatura negociando con unos (los nacionalistas vascos y canarios) y con otros (Ciudadanos) y, en ese contexto, pidió a los socialistas que se sumen a la labor de sacar a España del pozo y les instó a dejar la “política de escaparate”.

Fuentes del PP se quejan en privado de que con este nuevo PSOE de Pedro Sánchez es más “difícil articular un diálogo en el día a día” que antes, con la gestora encabezada por Javier Fernández. Estas fuentes suponen que todavía falta rodaje al nuevo equipo nombrado por el secretario general y señalan en concreto las “complicaciones” de negociar con la nueva portavoz en el Congreso, Margarita Robles. Mejor se entienden con José Luis Ábalos, secretario de organización. “Robles no es que tenga mucha mano izquierda. A veces es más sencillo llegar a un acuerdo con Irene Montero [Podemos] que con ella”, lamenta un alto cargo de los populares.

El PSOE considera que las quejas del PP sobre la dificultad de su relación obedecen a un motivo fundamental: la “nostalgia” de un tiempo que no volverá, señalan en la dirección socialista. Tras la traumática dimisión de Sánchez el pasado otoño, el Gobierno comenzó a tratar al partido, entonces gobernado por una gestora, como un socio “preferente”, más incluso que Ciudadanos. Hubo pactos sobre el techo de gasto para el 2017, la subida del salario mínimo y la reforma del impuesto de sociedades. La relación entre los portavoces parlamentarios del PP y el PSOE, Rafael Hernando y Antonio Hernando, era muy fluida. Pero todo eso se acabó con la victoria de Sánchez en las primarias de mayo.

Relación personal menos tensa

“Ahora volvemos a liderar la oposición”, explican las mismas fuentes, que al mismo tiempo reconocen que la comunicación entre el líder socialista y el presidente del Gobierno es ahora menos tensa que antes, como pudo verse en la cita que mantuvieron a principios de julio, donde Sánchez le transmitió su apoyo frente al referéndum. Por una razón, confiesan en el PP: porque ahora ya está claro quién es el jefe del Ejecutivo y no hay que decidir nada trascendental.

Además, la reciente declaración como testigo del líder del PP en el juicio del ‘caso Gürtel’ ha provocado el aumento de los ataques del PSOE. “Señor Rajoy, por dignidad tiene que dimitir. No arrastre a España en su caída”, dijo Sánchez poco después de que el presidente saliera de la Audiencia Nacional. Aun así, los socialistas no se cierran a llegar a nuevos pactos con el PP, como el alcanzado la semana pasada sobre violencia de género, suscrito por todos los grupos parlamentarios menos Podemos, que se abstuvo. Y, remarcan, Sánchez y los suyos continuarán respaldando las acciones del Ejecutivo ante la crisis territorial.