'Noche Sabinera' llega a Luz de Gas con la "sensual" Mara Barros

La Noche Sabinera regresa hoy viernes 30 de octubre a una de sus salas fetiche, Luz de Gas de Barcelona (a las nueve). Y, por primera vez, llega con la arrebatadora Mara Barros, comiéndose literalmente el escenario. Pancho Varona y Antonio García de Diego la reclutaron este mismo año, en enero del 2015. Una década después de que a ellos se les ocurriera, bueno, junto a Rubén Martínez de Les Nits de l'Art, esta exitosa fórmula de recrear el repertorio deJoaquín Sabina -todo lo que abordan también lleva su firma como coautores-, invitando al público a compartir micrófono y cantar con ellos. "Si yo no estaba al principio es porque era demasiado joven", ríe, con cierta malignidad y mucha complicidad, la cantante y corista de El Flaco de Úbeda.

Los generosos Pancho y Antonio tienen retranca. Y le replican echándole piropos. "Mara aporta muchísimo. Tanto, que se ha hecho imprescindible, a todos los niveles. Por su talento, su trato con el público, su simpatía… Nosotros dos cantamos un par de temas menos para que ella interprete cuatro", explica Varona. "Ella pone frescura y, a la vez, feminidad, lo que le separa de esta cosa tan aburrida que somos Pancho y yo –añade García de Diego-. Sin olvidar su parte sensualoide, porque Mara es muy gráfica y no solo como cantante: tiene ese tipo de actitud sensual en el escenario que conecta mucho. Sobre todo, con el mundo varonil". "¡Varonil de Varona!", añade entre risas el ágil Pancho.

INCERTIDUMBRES SUPERADAS

A pesar de las noches de éxito que acumulan, antes de cada una planean las incertidumbres. "Nada se puede dar por hecho. Siempre estás con el miedo de no vender suficientes entradas, de si la gente se animará a subir y cantar… Nuestro aforo habitual es de 300", constata Pancho. "Entre 300 y 300.000", bromea Antonio. "Hace poco actuamos en un pueblecito de Segovia, y a lo que aspirábamos era 50. Todos los días aprendemos algo. Seguimos sin saber cuál es el secreto. Bueno, sí: son las canciones. Es Sabina. Es la figura de Joaquín", prosigue Pancho.

Muchos artistas quisieran una gira tan intensa como la de 'Noches Sabineras'. De hecho, a veces no dan abasto. "En ocasiones hemos tenido que decir que no a algún concierto, pero también porque estamos trabajando con Joaquín”, comenta Pancho. ¿Y en qué fase está ahora el jefe? "Vamos a tomar la recomposición que aparcamos por el último 'tour'. Ya empezamos a reunirnos, pero por un motivo u otro, hemos tenido que parar. Todo va muy despacio. Trabajar con Joaquín es como un transatlántico que cuesta sacar del puerto. Hay que tener mucha paciencia", reconoce.

"A estas edades, la indolencia forma parte del trabajo –apunta Antonio-. Pancho, que es hiperactivo, está viviendo la efervescencia siempre. Pero el resto… Además, también ha pasado que Joaquín ha estado fastidiado de los pies, y se ha volcado más en sus pinturas". "Lo que necesitamos es ponernos horarios de oficina. ¡La de veces que íbamos a casa de Joaquín y él ni se acercaba! Estaba en el sofá y... ¡le interesaba una mierda! Eso fue en su etapa más oscura", confiesa Antonio. "A veces, aparecía en pijama y preguntaba 'qué tal vais, ¿bien? Pues vale. Ya volveréis la semana que viene", sigue relatando Pancho.

Los músicos de cabecera de Sabina y productores de varios de sus discos, aseguran que su creatividad funciona mejor "por encargo", "por obligación". Fueron incontinentes, dicen, "hace 20 años, cuando hacíamos una canción cada tres minutos. Pero ya no puede ser así", admite Varona. "Es más, antes hacíamos canciones y ahora nos dedicamos a silbar", chancea Antonio. "Hey, que yo el otro día me levanté de la cama a las cinco de la madrugada porque me vino la inspiración y cogí el móvil y me puse a grabar cantando bajito, para no despertar a la familia", se enorgullece Pancho.

TALENTO GENEROSO

Para los amantes de la buena música, son harto conocidos (también son responsables de éxitos de Ana Belén, Víctor Manuel, Luz Casal, Christina Rosenvinge…), además de instrumentistas de primer orden. En esta gira de 'Noche Sabinera', vale la pena remarcar, recrean canciones que contienen cachitos de su creatividad. De intrusos, nada. Las han coescrito, producido, hecho los arreglos…El mismo Sabina les permite fugazmente ejercer de 'frontmen'. Aunque ellos prefieren estar un metro más atrás. En la imprescindible retaguardia.

En el currículo de Antonio García de Diego figura sus colaboraciones con la mítica banda Triana (con la que tocó y grabó), su paso por Los Canarios (sí, con Teddy Bautista "antes de que la megalomanía le perdiera"), sin olvidar los muchos años que ha arropado como instrumentista y compositor a Víctor Manuel y Ana Belén. Del cancionero de Sabina, le gusta que mencionen en los créditos de títulos como 'Contigo', 'A la orilla de la chimenea', 'Y sin embargo'…

Pancho Varona abandonó el grupo Viceversa para aliarse con Sabina, que le hizo debutar haciendo de exhibicionista (con gabardina incluida) cuando corría el año 1982. El autor de himnos como 'Y no me importa nada' de Luz Casal, gasta una incorruptible humildad. Tanto, que suelta que lo único que en realidad hace es "rellenar crucigramas". "Nada que ver con Joaquín: él sí es un poeta". Y explica que le gustaría pasar a la historia como el autor de 'Ruido': "Me mueve las tripas, y tuve la suerte de hacerle la música por y para Sabina. Es la que más me emociona. Y 'Peces de ciudad', claro…".

Mara Barros también tiene su pasado. Optó por presentarse al concurso 'Popstars' como única opción para que las discográficas que tantas veces le habían rechazado su maqueta se dignaran a publicarle un disco. Acabó haciéndolo una que le dijo 'no' hasta cinco veces. Publicó el álbum 'Dímelo tú', con la participación del italiano Paolo Vallesi y el cubano Pancho Céspedes, al que convenció invitándole "a comer un cocido en Madrid". "Bueno, le convenció el cocido y mi escote", ríe. "O sea, que pagaste a escote, ¿no?", le pregunta con guasa García de Diego.

DIVERTIDO TRÍO

La cantante de Huelva asegura no tener prisa por volver a grabar. "Tengo un sentimiento contradictorio con este tema. No lo descarto. Pero mi meta ya la he alcanzado: siempre quise con trabajar con Sabina. Además, la postura de corista ¡es tan cómoda! Te expones menos, y con mi nivel de vaguería personal…"

Antonio le ayuda a encontrar más justificaciones: "También está el hecho de que Joaquín es muy generoso. Y le da sus momentos de lucimiento". "Es cierto -reconoce Mara-. Me dice, 'haz lo que te dé la gana'. Y yo canto, bailo, me cambio las veces que quiero de vestuario…". "Joaquín potencia nuestra posible carga artística en el escenario", insiste García de Diego. "Bueno, también es verdad que cuando nos deja hacer nuestras canciones es porque él aprovecha para fumar. Que le va de puta madre, vaya -dice Varona-. El placer es mutuo".

Y compartido. Por una audiencia que disfruta cuando este divertido trío forma parte de la 'troupe' de Sabina en sus multitudinarias giras. Y cuando, en formato reducido, se llevan de paseo con nocturnidad y fidelidad canalla unas canciones que dotan de renovadas vida y energía.