Patrimonio arqueológico

Comienzan en Mataró los trabajos previos para la retirada de los restos arqueológicos de ca la Madrona

Tras el visto bueno de la Generalitat, el yacimiento será finalmente trasladado a la zona del Bon Recès

Mataró licita la retirada de los restos arqueológicos del yacimiento de Ca la Madrona

Intervención arqueológica en el yacimiento de ca la Madrona de Mataró

Intervención arqueológica en el yacimiento de ca la Madrona de Mataró / MARESME CIRCULAR

Gerardo Santos

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Ya están en marcha los trabajos previos para la retirada de los restos arqueológicos de ca la Madrona, encontrados durante la primera fase de construcción del Parc Circular Mataró-Maresme, en noviembre del 2020.

La empresa Baula Recerca Arqueològica SL lleva a cabo desde este martes el desbroce, documentación y consolidación de los restos, unos trabajos preparatorios al desmontaje y almacenamiento. Ello permitirá su futuro traslado a la zona del Bon Recès, "con el objetivo de reubicarlas en un centro de interpretación que permitirá divulgarlas", según informa el Consistorio para el Tratamiento de Residuos Sólidos Urbanos del Maresme (CTRSUM) en un comunicado.

La intervención cuenta con la autorización del Departament de Cultura de la Generalitat de Catalunya, un visto bueno que el Ayuntamiento de Mataró esperaba desde hace prácticamente un año. El contrato para desplazar la parte excavada del yacimiento se adjudicó el pasado mes de diciembre y quedó formalizado la semana pasada por un importe de algo más de 100.000 euros.

Se sortean así los requisitos necesarios para avanzar en las obras de construcción de la primera fase del Parc Circular Mataró-Maresme, que debería estar en pie para 2027, según los cálculos del consistorio. El Parc Circular nace con el objetivo de convertirse en una referencia en el sur de Europa en el ámbito del reciclaje, la reutilización de materiales, la reducción de residuos y, en definitiva, de la economía circular.

Oposición al traslado

De nada han servido los esfuerzos de la Associació en Defensa del Patrimoni Cultural de Mataró i el Maresme (ADEPAC), creada ex profeso para defender la permanencia del yacimiento en el lugar: "Este nuevo atentado contra el patrimonio de la ciudad era previsible desde el momento en el que el Ayuntamiento de Mataró lo solicitó en la Generalitat, mediante el informe favorable del consistorio, firmado por la actual arqueóloga municipal, Carme Puerta".

No ha pesado el hecho que el Pleno municipal del día 2 de noviembre de 2023 aprobase por mayoría absoluta que el Ayuntamiento declarase los restos como Bien Cultural de Interés Local (BCIL). Tampoco han pesado las opiniones en contra del desplazamiento de los restos que han publicado diversas entidades como por ejemplo la Secció Històric-Arqueològica del Insitut d'Estudis Catalans, o el Institut d'Arqueologia de la Universitat de Barcelona, o la Universitat Autònoma de Catalunya o la Universitat Rovira i Virgili.

"El resultado de todo es de nuevo la pérdida de un importante elemento patrimonial de la ciudad, alegando que siempre es más importante el futuro y el negocio económico, en detrimento de conservar los restos del pasado, los cuales nos dotan de personalidad, nos diferencian de otras ciudades del país y cimientan nuestro presente y nuestro futuro", se lamenta la ADEPAC.

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