campaña de comunicación

El emocionante espot con el que el Govern balear pide una Navidad diferente

Personal sanitario explica sus vivencias y alerta de que "vale más la pena perder una cena navideña que perder la vida en una UCI"

El vídeo finaliza con médicos, enfermeros y técnicos aplaudiendo a las personas "que lo hacéis bien"

Anuncio del gobierno balear sobre la Navidad en tiempos de coronavirus

Anuncio del gobierno balear sobre la Navidad en tiempos de coronavirus. /

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La primera imagen invita a soñar con una celebración navideña en toda regla. Los protagonistas desfilan uno a uno por esa mesa engalanada relatando cuál es su plato favorito durante las fiestas, recordando los chistes de cuñado, los abrazos y las "discusiones divertidas que siempre se repiten". Hasta que de pronto una voz recuerda que "esta no es una Navidad normal". El siguiente plano ya transcurre en una UCI: "Si me oyes, abre los ojos". Los comensales del espot son personal sanitario real, desde una doctora a un auxiliar de enfermería, pasando por un enfermero del 061, un celador o una técnica de laboratorio que ha perdido la cuenta de tantas PCR diarias. Todos ellos ilustran en primera persona cómo puede acabar un encuentro familiar o social en tiempos de covid-19, en el emocionante vídeo que ha lanzado esta semana el Govern de les Illes Balears como parte de una campaña para concienciar a todos del peligro de la relajación durante estas fiestas.

Uno a uno, desde la primera persona, narran sensaciones y dramas cotidianos en los hospitales, desde que la pandemia se coló en su rutina. "En nuestro trabajo lo que ahora he visto es mucha soledad. Cuando vas a intubar y te piden 'dígale esto a mi madre, a mi padre o a mi hijo", relata la enfermera Xima Delgado, con 20 años de experiencia. "Esto la gente no lo ve, si lo vieran tal vez cambiarían", reflexiona. Un compañero añade: "Ves el miedo en sus ojos, a lo que puede o no pasar".

Teresa Janer, una joven doctora, recuerda que "a lo mejor no despertarán de la intubación. Esto es muy difícil de explicar por teléfono y a mí me ha costado mucho". El auxiliar de enfermería de la UCI Andreu explica lo impactante que es "ver a una persona joven intubada, que parece un astronauta de tantos cables que lleva" pero está "como un vegetal". "Te lo han de hacer todo", remata.

Consecuencias muy graves

De nuevo ante los platos, los profesionales recuerdan que "las consecuencias de juntarnos a la mesa pueden ser graves". Porque "habrá gente que lo pasará muy mal y otra que no llegará al año que viene". La enfermera Xima Delgado lo resume en que es hora de "hacer balance". "Vale más la pena ahora perderse una cena con la familia o una reunión con los amigos del trabajo que no perder la vida en una unidad de curas intensivas", agrega la doctora, con emoción.

Con mensajes como "hay más navidades que vidas" o "si tanto nos queremos podemos esperar un año más", disparan a las conciencias mirando directos a cámara. Y de repente, los papeles se invierten: "A todos las personas que lo hacéis bien, este aplauso es para vosotros". Uno a uno, los sanitarios se suman a unas palmas que durante meses fueron dirigidas a ellos, cuando eran (y son) héroes. Pero la mayor heroicidad es ahora es la prudencia.