Reunión en Yeda

EEUU busca estrechar lazos con Arabia Saudí en pleno auge de la presencia china en la región

El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, primer ministro saudí, Mohamed bin Salmán (MBS), en Yeda.

El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, primer ministro saudí, Mohamed bin Salmán (MBS), en Yeda. / REUTERS

Andrea López-Tomàs

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En Arabia Saudí, viven una semana frenética. Tras los recortes de la producción de petróleo, la sociedad saudí presencia la reapertura de la embajada iraní, la visita del presidente venezolano, Nicolás Maduro, y, sobre todo, el viaje del secretario de Estado de EEUU, Anthony Blinken, durante tres días. Con los derechos humanos en el país en segundo plano, el más alto diplomático de Estados Unidos viajó este martes hasta el reino para negociar un acuerdo diplomático con Israel, poner fin a la guerra en Yemen y asegurar fondos para contrarrestar el Estado Islámico. La Administración de Joe Biden busca recuperar la estrecha cooperación saudí en pleno aumento de la presencia china en la región.

"Hubo un buen grado de convergencia en iniciativas potenciales en las que compartimos los mismos intereses, al mismo tiempo que reconocimos dónde tenemos diferencias", ha dicho un funcionario estadounidense a Reuters respecto a la reunión en Yeda entre Blinken y el príncipe heredero saudí, el gobernante de facto del reino, Mohamed bin Salmán, conocido como MBS. Gran parte de la conversación de casi dos horas ha sido dominada por la posible normalización de los lazos con el Estado hebreo. "Discutieron el potencial para la normalización de las relaciones con Israel y acordaron continuar el diálogo sobre el tema", ha añadido el funcionario. Antes de partir hacia el desierto saudí, Blinken subrayó el "interés real de seguridad nacional" de Estados Unidos en este tema. 

Embajada iraní

Se trata de la primera visita de Blinken después de la reanudación de relaciones de Arabia Saudí con Irán, el archienemigo regional saudí, tras siete años de rivalidades. Horas antes de que el diplomático estadounidense aterrizara en el reino, ambos países han celebrado la oficialización de su reconciliación. Este martes Irán reabrió de forma oficial su embajada en Arabia Saudí por primera vez en siete años. La ceremonia en el interior del recinto congregó a decenas de diplomáticos y funcionarios en lo que el viceministro de Relaciones Exteriores de Irán para Asuntos Consulares, Alireza Bikdeli, describió como "un día importante en las relaciones" entre ambos países. "La región avanzará hacia una mayor cooperación y convergencia para lograr la estabilidad, la prosperidad y el progreso", añadió en su discurso.

Además, la visita de Blinken ocurre pocos días después de que Arabia Saudí se comprometa a reducir aún más la producción de petróleo, una medida que probablemente agregue tensión a la relación entre Washington y Riad. Ya estos vínculos están dañados por los continuos enfrentamientos de MBS con Biden por su suministro de petróleo crudo a los mercados globales, su disposición a asociarse con Rusia en la OPEP+ y por llegar a la distensión con Irán mediada por China. A partir de julio, Arabia Saudí mandará un millón de barriles por día menos a la economía mundial, ya que la alianza de los principales países productores de petróleo se enfrenta a la bajada de los precios y a un exceso del suministro inminente. 

Lucha contra el EI

Durante esta ajetreada semana, también el presidente venezolano ha visitado Arabia Saudí en su primer viaje al Golfo desde 2015. Pese a la oposición de Washington, Maduro ha podido consolidar aún más los lazos del país latinoamericano con la región tras reunirse con varios representantes saudís, como MBS. Ambos miembros de la OPEP+ afirmaron en un comunicado que "se mantendrá unida y disciplinada para regular el mercado petrolero de acuerdo a las necesidades de la humanidad". Además, la visita de Maduro supone el último ejemplo de Arabia Saudí buscando el acercamiento con estados que tienen relaciones difíciles con Estados Unidos, como ha hecho recientemente con Irán y Siria.

En los próximos dos días, Blinken tiene previsto participar en una reunión del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), integrado, además de Arabia Saudí, por Catar, Kuwait, Omán, Baréin y Emiratos Árabes. Asistirá asimismo a una reunión de la coalición internacional contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI), según ha explicado un enviado especial para dicha coalición, Ian J. McCary. El EI, pese a tener su raíz en Irak y Siria, está ahora más activo en el continente africano, lo que puede desestabilizar a muchas regiones, sobre todo en el Sahel. Blinken expresó a Bin Salmán su agradecimiento por el liderazgo de Arabia Saudí en la organización de la coalición y destacó los "continuos esfuerzos conjuntos para luchar contra el terrorismo".