Medida sanitaria

Alemania convierte en obligatoria la vacuna contra el sarampión

La inyección será obligatoria tanto para niños en edad escolar como para empleados de centros educativos, consultas médicas y centros de refugiados

Una vacuna.

Una vacuna. / Departament de Salut

EFE

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La vacunación obligatoria contra el sarampión (administrada habitualmente como parte de la conocida como vacuna triple vírica) entrará en vigor en Alemania a partir de este domingo para niños y ciertas categorías de empleados. Este 31 de julio finaliza la fase de transición, durante la cual sólo era obligatoria para los niños cuyas familias solicitaran la admisión en una guardería, después de que el Parlamento alemán aprobara la medida en 2019.

A partir de ahora, las familias de los niños en edad escolar que no lo hayan hecho todavía deberán aportar una prueba de vacunación o un certificado de que han superado el sarampión. También deberán probar su inmunidad los empleados de centros educativos, consultas médicas, hospitales y centros de refugiados, entre otros.

La ley prevé que los niños que no estén vacunados puedan quedar excluidos de ir a la guardería, aunque en el caso de la educación primaria eso no es posible debido a la escolarización obligatoria, aunque está prevista la imposición de multas de hasta 2.500 euros para quienes contravengan la medida.

Medida contra los brotes

La aprobación de la vacunación obligatoria por parte del Parlamento causó un gran debate social en Alemania y el Tribunal Constitucional falló en contra de la petición de un grupo de padres que quería llevar a sus hijos a la guardería sin vacunar.

Según los medios alemanes, los brotes de sarampión son frecuentes en el país porque está inmunizada menos del 95 % de la población, el porcentaje que según la Organización Mundial de la Salud (OMS) es necesario para evitar la difusión de la enfermedad.

Las autoridades sanitarias internacionales advirtieron ya el año pasado que el número de niños no vacunados contra el sarampión a escala mundial ha experimentado el mayor incremento de las últimas dos décadas. En 2020, se estima que más de 22 millones de bebés no recibieron la primera dosis de la vacuna contra el sarampión (3 millones más que en 2019). Además, coincidiendo con los peores momentos de la pandemia, la cobertura de la primera dosis de vacuna contra el sarampión se redujo y solo el 70% de los niños recibieron la segunda, muy por debajo del 95% por ciento de cobertura necesario para proteger a las comunidades de la propagación del virus del sarampión.