El barranco de la abuela

¿Qué fue la masacre de Babi Yar que Ucrania compara con el bombardeo al memorial de Kiev?

El ataque de este martes al monumento a las víctimas de esta masacre ha revivido el horror del Holocausto en la capital ucraniana, donde antes de la II Guerra Mundial uno de cada cuatro habitantes era judio

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Memorial del Holocausto de Babi Yar, en Kiev, antes del bombardeo del martes.

Memorial del Holocausto de Babi Yar, en Kiev, antes del bombardeo del martes. / AFP

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El terror en Kiev se repitió ayer con los bombardeos rusos más de ochenta años después de la masacre de Babi Yar, donde más de 50.000 judíos fueron asesinados por los nazis y sus cadáveres volados con dinamita. El ataque de este martes al monumento a las víctimas de esta masacre ha revivido el horror del Holocausto en la capital ucraniana, donde antes de la II Guerra Mundial uno de cada cuatro habitantes era judio.

La 'Operación Barbarroja' fue lanzada por Hitler en el verano de 1941 para derrotar a la URSS. El primer objetivo fue precisamente Kiev.

Baby Yar está al noroeste de Kiev. En septiembre de 1941, los alemanes ordenaron a todos los ciudadanos judíos a congregarse para ser trasladados. El mensaje nazi era claro: “Todos los judíos residentes en Kiev y sus alrededores deben presentarse mañana lunes a las ocho de la mañana en la esquina de las calles Melnikovsky y Dokhturov. Deben portar sus documentos, dinero, objetos de valor y también ropa de abrigo. Cualquier judío que no cumpla estas instrucciones y que sea encontrado en algún otro lugar será fusilado. Cualquier civil que entre en las propiedades evacuadas por los judíos y robe sus pertenencias será fusilado”.

Aniversario de la masacre de Babi Yar, el pasado octubre.

Aniversario de la masacre de Babi Yar, el pasado octubre. / Sergei Supinsky / AFP

Dos años antes de este fatídico día, la población judía era de aproximadamente 175.000 personas, uno de cada cuatro habitantes de Kiev era judío. En el momento de producirse esta orden, la comunidad judía había descendido a menos de 50.000 personas.

Babi Yar significa 'El barranco de la abuela'. Además de un hospital psiquiátrico en el que los nazis mataron a todos los enfermos que había, aquel aciago lunes de septiembre se convirtió en la fosa común de 33.771 cuerpos. Allí había también una cárcel y, como su nombre indica, un barranco que las SS convirtió en un patíbulo, escenario de este genocidio a plomo.

Más de 3.000 hombres de los escuadrones itinerantes especiales formados por miembros de las SS y otros integrantes de la policía secreta de la Alemania nazi perpetraron la matanza a tiros.

Dos tercios del total de judíos de la ciudad de Kiev quedaron cubiertos por una capa de tierra en la inmensa fosa. Durante los meses siguientes, el resto de los judíos que habían logrado escapar fueron también tiroteados.

Israel se ofrece a colaborar en la reparación del memorial al Holocausto de Kiev

Por su parte, las autoridades israelíes han trasladado a las ucranianas su disposición para colaborar en la reparación del memorial del Holocausto de Babi Yar,

"Por instrucción del ministro de Exteriores, Yair Lapid, el embajador en Kiev está en contacto con los administradores del sitio y, cuando sea posible, ayudaremos a reparar el daño", ha trasladado el Ministerio de Asuntos Exteriores israelí en un comunicado recogido por 'The Times of Israel'.

Lapid ha lamentado los daños ocasionados en el monumento al Holocausto así como a un cementerio judío cercano, si bien es cierto que se ha abstenido de acusar directamente a Rusia de los desperfectos. "Pedimos que se proteja y se honre este sitio sagrado", ha añadido.

Las autoridades ucranianas han denunciado este martes un ataque con dos misiles a la torre de telecomunicaciones de Kiev. A consecuencia de estos lanzamientos, al menos cinco personas han fallecido y otras cinco han resultado heridas.

El memorial Babi Yar se encuentra en las inmediaciones de dicha infraestructura de comunicaciones, por lo que se ha visto severamente afectado por la explosión de los misiles.

Tras este suceso, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, se ha cuestionado "de qué sirve decir 'nunca más' durante 80 años, si el mundo se queda en silencio cuando cae una bomba en el mismo sitio de Babi Yar". "La historia se está repitiendo", ha lamentado el mandatario en un mensaje en sus redes sociales.