El papel protagonista de TikTok en la movilización palestina

La espiral de violencia que sacude Jerusalén también ha llegado a las redes sociales. Estuvieron presentes para documentar los intentos de desalojo de familias palestinas de la ciudad sagrada por parte de colonos y lo siguen estando ahora para denunciar la represión de Israel, que ha causado al menos 26 muertos y 122 heridos tras bombardear la Franja de Gaza.

Encallados desde hace décadas en una perpetua marginalización, cada vez son más los jóvenes palestinos que acuden a plataformas para amplificar su protesta. El papel de TikTok, la aplicación de vídeos cortos china, ha sido crucial en la escalada de tensión en Tierra Santa. La etiqueta ‘Palestine’ cuenta ya con 4.800 millones de visualizaciones en todo el mundo; ‘FreePalestine’ (Palestina Libre), con 29,4 millones y ‘SaveSheikhJarrah’ (en referencia al barrio desalojado), con 108,9 millones.

Como otras redes sociales, la popular plataforma —que acumula 689 millones de usuarios mundiales al mes— está siendo utilizada para denunciar la represión que sufren los palestinos, pero también para documentar sus vidas y hacer difusión de su cultura y tradiciones, de su gastronomía o de su identidad nacional. También para los refugiados palestinos que viven en otras zonas del mundo y que no pueden regresar a su hogar, pues Israel niega desde hace 70 años ese derecho al retorno. El formato ágil de los vídeos, el tono irónico y la creatividad de las nuevas generaciones hace también que TikTok funcione como espacio de activismo político.

Bloqueo también en las redes

Sin embargo, múltiples usuarios han denunciado en otras otras plataformas el bloqueo o eliminación de vídeos colgados en TikTok sobre Palestina. En algunos casos se informa que eso se debe a que contienen "demasiada violencia"; en otros, como la suspensión del canal de noticias palestino QNN a principios de año, las razones son más opacas. La oenegé 7amleh ha denunciado campañas organizadas en TikTok para denunciar vídeos palestinos en masa para que los retiren.

Otro grupo de oenegés denunció este lunes que Facebook y Twitter habían eliminado y suspendido mensajes y cuentas críticas con la represión de la policía israelí. La red social de Mark Zuckerberg explicó que se debía a "un error". En 2019 Human Rights Watch (HRW) advirtió que Israel monitorea de cerca a los palestinos en Internet.

Reivindicación y propaganda política

El poder de amplificación de la plataforma social la ha consolidado como espacio de expresión y propaganda política. En enero del 2020 el ejército de Israel abrió su cuenta con una broma sobre su uso de bombas. Justo este lunes, el cuerpo colgó un vídeo en el que celebra el Día de Jerusalén y aplaude a los militares que, en 1967, capturaron la ciudad sagrada.

Sin embargo, esa fuerza de difusión también ha hecho que se use con fines violentos. Así, dos chicos palestinos de 17 años colgaron un vídeo en el que abofeteaban a un joven judío ultraortodoxo en el metro de Jerusalén. Aunque ambos fueron detenidos, el vídeo indignó a la extrema derecha sionista, que lanzó el pasado 21 de abril a cientos de personas armadas a las calles, en una protesta en la que se cantó “Muerte a los árabes”. La contraprotesta palestina fue reprimida por la policía con gases lacrimógenos y 44 detenciones. Poco después, jóvenes colonos israelíes utilizaron la red social para difundir vídeos en los que insultaban y agredían a ciudadanos palestinos. El espiral de violencia no ha cesado desde entonces.

El potencial de difusión de TikTok es incuestionable, pero su uso como herramienta de vejación y humillación a las víctimas puede amplificar consecuencias inesperadas. En un escenario tan inflamable como Jerusalén, eso ha dado paso a una nueva ola de protestas y represión en las calles.

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