Una colonia penitenciaria llamada IK-2

Navalni compara su prisión con un "campo de concentración"

En un mensaje en Instagram, el bloguero relata que hay cámaras por todas partes y que es vigilado incluso durante la noche

El opositor fue trasladado la semana pasada a una estricta colonia penitenciaria llamada IK-2, a 100 kilómetros de Moscú

Navalni llega a su juicio en Moscú

Alexei Navalni llega a su juicio en Moscú. /

Marc Marginedas

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Incluso desde del interior de una colonia penitenciaria donde todos y cada uno de sus movimientos son vigilados, el líder opositor ruso Alekséi Navalni continúa demostrando que dispone de recursos suficientes como para mantener la comunicación con sus seguidores y trasladar extramuros el relato sobre las condiciones de su cautiverio. El bloguero ha difundido este lunes en su cuenta de Instagram un nuevo mensaje en el que compara la institución a la que le acaban de trasladar las autoridades penitenciarias de Rusia con un "campo de concentración".

Acompañando el texto de una fotografía con el pelo ya rapado, el prisionero saluda a sus partidarios desde la colonia penitenciaria IK-2, en las afueras de Pokrov, no lejos de la capital rusa, a donde fue trasladado la semana pasada desde un centro de detención provisional. "Hay que reconocer que el sistema penitenciario ruso no deja de sorprenderme; no me podía ni imaginar que se podía construir todo un campo de concentración a 100 kilómetros de Moscú", escribe con una pizca de sorna.

Aunque admite no haber sido objeto de violencia alguna, ni siquiera de haber sido testigo de episodio alguno de la misma, Navalni admite creer a pies juntillas las versiones que circulan y que hablan de prisioneros de IK-2 que han llegado a estar cerca de la muerte tras haber sido golpeados con "martillos de madera". El opositor extrae tal conclusión a juzgar por "la postura tensa de los presos, firmes y temerosos de girar la cabeza" siquiera.

La vigilancia sobre los inquilinos de IK-2 es permanente, gracias a "las cámaras que hay en todas partes" que permiten "denunciar al recluso y sancionarlo", prosigue. "Creo que alguien en el piso de arriba leyó '1984' de (George) Orwell y dijo: sí hagámoslo (aquí) la educación a través de la deshumanización", continúa el bloguero, sin abandonar el sarcástico sentido del humor que destilan habitualmente sus escritos.

Tipificado por la justicia rusa como un preso "propenso a fugarse", las noches de Navalni en IK-2 están repletas de desvelos en mitad del sueño. Cada hora, recibe la visita de un funcionario de prisiones, quien comprueba que se halla en su lugar. "Me filma con una cámara y dice: 'dos horas y 30 minutos, condenado Navalni; realización de registros preventivos por fuga; en su lugar'".

IK-2 es una colonia penitenciaria calificada como "de régimen habitual". Sin embargo, presos que allí han sido internados sostienen que dicha tipificación no quiere decir nada y que en realidad se trata de una prisión de alta seguridad. El entorno del opositor se ha negado a desvelar el método por el que logra hacer llegar sus mensajes a su cuenta de Instagram, que cuenta con 4,2 millones de seguidores.