L'Hospitalet ante las municipales: un mandato marcado por la pandemia, el PDU y el 'Caso Consell Esportiu'

La composición actual del Pleno

L'Hospitalet de Llobregat es uno de los grandes bastiones socialistas en Catalunya: en las municipales del 2019, sólo Santa Coloma de Gramenet (50,94%) y Cornellà de Llobregat (47,45%) superaron a L'Hospitalet (43,35%), segunda urbe catalana más poblada con 264.657 habitantes, en porcentaje de voto socialista en el área metropolitana de Barcelona.

El PSC ha ganado las elecciones municipales en el municipio desde los primeros comicios democráticos de 1979. En la última convocatoria del 2019, los socialistas recuperaron una mayoría absoluta (14 concejales de los 27 totales del Pleno) de la cual no gozaban desde 2011, año en que, tras encadenar casi 30 años (desde 1983) tiñendo de rojo más de la mitad del Pleno hospitalense, cedieron la amplia mayoría absoluta de 17 ediles que habían cosechado en 2007. A pesar de las amplias mayorías, los socialistas gobernaron en coalición con ICV-EUiA durante cuatro mandatos hasta las municipales del 2015: en diciembre del 2014 abandonó el Gobierno municipal <strong>EUiA</strong> y posteriormente, ya en mayo del 2015, hizo lo propio ICV.

Por su parte, la actual alcaldesa, Núria Marín, llegó al cargo en 2008 como relevo de Celestino Corbacho, alcalde durante 14 años y exministro de Trabajo de Zapatero, y ha sido reelegida en las tres convocatorias electorales desde entonces: 2011, 2015 y 2019. Sumados a los 14 regidores del PSC, el actual Pleno municipal de L'Hospitalet está compuesto por 5 ediles de ERC, líder de la oposición; 4 de Ciutadans; 3 de L'Hospitalet en Comú Podem-En Comu Guanyem; y 1 del PP. En mayo del 2019 votaron en L'Hospitalet un total de 101.202 personas, dato que registró una participación del 57,48% en un censo total de 176.054 votantes.

Las claves del mandato 2019-2023

El presente mandato político en L'Hospitalet ha estado marcado por tres grandes cuestiones de distinta magnitud: el confinamiento de los <strong>barrios más densos</strong> de la ciudad en pleno auge del coronavirus, que ocasionó un <strong>Pacto de Ciudad</strong> de reactivación económica; el judicializado avance del <strong>Plan Director Urbanístico (PDU)</strong> que prevé el soterramiento de la Gran Via y la creación de un polo de actividad biomédica; y el desarrollo judicial de la investigación del 'Caso Consell Esportiu', cuyas primeras detenciones se produjeron a mediados del 2020 y del cual, dos años después y tras el volcado de sus mensajes de WhatsApp por parte de la Policía, ha resultado el archivo de la causa contra alcaldesa <strong>Núria Marín</strong>.

En relación a este último proceso judicial, la alcaldesa Núria Marín compareció este pasado jueves, a petición de ERC, ante la Comissió d'Afers Institucionals (CAI) del Parlament de Catalunya para dar explicaciones sobre el caso que mantiene como encausados a dos exconcejales socialistas ya dimitidos:Cristian Alcázar y Cristóbal Plaza. "Tengo el convencimiento de haber actuado de manera políticamente responsable y éticamente impecable", zanjó Marín ante los diputados.

En cuanto al PDU, el Consorci per a la Reforma de la Gran Via de L'Hospitalet, entidad integrada por Generalitat y Ayuntamiento de L'Hospitalet impulsora del proyecto, prevé que la aprobación provisional del Plan se produzca durante el último trimestre de este 2022, y la definitiva en marzo del 2023, justo antes de las municipales. Las controversias medioambientales que han marcado las fases de tramitación del PDU entroncan a su vez con el debate en el municipio sobre la falta de zonas verdes, avivado recientemente por la ola de calor veraniega.

El tablero político de cara al 2023

Las elecciones municipales de mayo del 2023 se prevén marcadas por la influencia local de la activación del PDU Gran Via-Llobregat, cuya aprobación definitiva está prevista para el primer trimestre del año, y sobre todo por el 'Caso Consell Esportiu', con tempos judiciales difícilmente previsibles más allá del archivo de la causa contra la alcaldesa Núria Marín. Por lo pronto, la primera edil, aunque no de manera oficial, ha hecho pública su intención de volver a liderar la candidatura socialista por cuarto mandato completo consecutivo, ante el gran interrogante de si revalidará la actual mayoría absoluta.

Por su parte, ERC, formación que lidera la oposición en L'Hospitalet, ya anunció en junio, en un claro movimiento por captar voto socialistadescontento, que su nuevo alcaldable será Jaume Graells, el exconcejal socialista que dio inicio al 'Caso Consell Esportiu' denunciando las supuestas irregularidades de la entidad, mientras que los 'comuns', cuarta formación por detrás de Ciutadans en cuanto a representación de concejales, buscará hacer valer políticamente su complejo papel como <strong>acusación popular</strong> del caso.

Otro de los grandes interrogantes locales versa sobre el rol que jugarán en el nuevo Pleno del 2023 Ciutadans y PP, este último ahora ya residual con un solo concejal, ante la posible entrada de Vox en el consistorio. En las elecciones catalanas de febrero del 2021, la candidatura de ultraderecha cosechó en L'Hospitalet una cuota del 9,60% (7.729 votos), casi el doble del 5% mínimo que necesitaría para entrar en el Pleno en mayo del 2023, si se extrapolan los resultados a escala local. En las generales de noviembre del 2019, fueron 8.743 los hospitalenses que votaron a Vox (7,25%), también por encima del citado umbral de entrada al consistorio. Sin embargo, medio año antes, en las generales de abril del 2019, Vox logró un 3,96% (5.117 votos), dato que le sería insuficiente para obtener representación en las municipales.