Epi y Blas celebran el avance en los derechos de los homosexuales en la portada de 'The New Yorker'

Son marionetas asexuales, amigos en la ficción de un universo televisivo llamado 'Barrio Sésamo'. Al menos esa es la idea en la que han insistido una y otra vez sus creadores, pero que parece no haber borrado del imaginario colectivo que estos personajes, a los que algunos se empeñan en atribuir tendencias homosexuales, son algo más que amigos.

Y este 28 de mayo, con motivo del Día del Orgullo gay y tras la declaración de inconstitucionalidad por parte del Supremo de Estados Unidos de una parte de la ley de defensa del matrimonio de 1996 --que negaba prestaciones federales igualitarias a los enlaces gais--, se han convertido en los protagonistas de la portada de la revista 'The New Yorker'.

La primera plana del semanario muestra una ilustración en la que Epi y Blas contemplan desde el sofá, y en una actitud muy relajada, una foto de los miembros del tribunal responsable del importante avance en los derechos de los homosexuales que ha hecho el país con la revisión de la norma que, además, ha permitido que vuelvan a legalizarse las bodas entre personas del mismo sexo en California, que se habían interrumpido tras un referendo.

"Es asombroso ver cómo ha evolucionado la actitud hacia los derechos de los homosexuales a lo largo de mi vida", ha expresado Jack Hunter, autor de la ilustración que ha colocado a los personajes como icono gay y que fue distribuída inicialmente a través de la red social de 'blogging' Tumblr. "Es estupendo para nuestros niños, un momento que todos podemos celebrar", ha añadido.