EL RIVAL AZULGRANA

Osimhen, la máquina de matar del Nápoles

El club italiano invirtió 70 millones de euros en fichar al delantero centro nigeriano de 23 años que despuntaba en el Lille

Victor Osimhen.

Victor Osimhen. / Alberto Pizzoli / AFP

Joan Domènech

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Una máquina de matar. Es la primera respuesta, espontánea, de un fiel aficionado del Lille cuando escucha el nombre de Victor Osimhen. Una máguina de matar. La máscara no oculta el rostro de un forajido; solo protege la cara de quien tuvo que ser operado de fracturas múltiples. Y no por una pelea o en un ajuste de cuentas, sino en un choque de cabezas con Milan Škriniar, defensa, para más señas, del Inter de Milan.

Una máquina de matar. Metáfora de delantero goleador. La imagen que sugiere Osimhen, futbolista nigeriano de 23 años (nació en Lagos el 29 de diciembre de 1998) y por quien el Nápoles invirtió 70 millones de euros en verano de 2020, tras solo una temporada en el Lille, que a su vez le había fichado después de una campaña en el Charleroi de Bélgica, club que apostó por él cuando estaba en el Wolsfburgo de Alemania, que le atrapó en sus redes al acabar el Mundial sub-17 celebrado en Chile en noviembre de 2015. En aquel evento, Osimhen fue el máximo goleador del torneo (10 goles en 7 partidos, el segundo, el alemán Johannes Eggestein  solo anotó cuatro) y, por tanto, Bota de Oro, y obtuvo el Balón de Plata al segundo mejor jugador. Nigeria fue campeona.

Victor Osimhen se lamenta de una ocasión desperdiciada.

Victor Osimhen se lamenta de una ocasión desperdiciada. / AFP7

El Charleroi pagó 3,5 millones, el Lille subió a 20 al año siguiente y el Nápoles desembolsó 70 una temporada después.

Precio ascendente

El ascendente precio de Osimhen ha ido en consonancia con la progresión futbolística exhibida. El Charleroi pagó 3,5 millones al Wolfsburgo, el Lille entregó 14 (fueron 20 al final con variables) y el Nápoles dio de entrada los mencionados 70 millones. Precio de estrella. De un jugador franquicia, cuando menos.

"Tiene mucho gol", afirman de Osimhen. Suficiente. Es la cualidad más preciada de cualquier delantero. Y tiene más cosas: "Le gusta atacar los espacios y moverse en profundidad, pero también tiene la capacidad de ser un nueve de área", precisó advertía Christophe Galtier, su extenrenador en el Lille. "Es capaz de organizar toda la presión alta del equipo. Hace el trabajo de dos o tres jugadores", asegura otro técnico que le siguió en la liga francesa. Quizá por eso juega solo en punta en el Nápoles de Spalletti.

"Le gusta atacar los espacios y moverse en profundidad, pero también tiene la capacidad de ser un nueve de área"

— Christophe Galtier / Exentrenador del Lille

Pero aún enseña algunos defectos pese a que se le compara con Etoo por su rapidez para rematar y con Lukaku para superar a los defensas por potencia. “Tiene un potencial infinito. A veces se va a hacer un uno contra once porque no se da cuenta que el equipo no le sigue, pero está aprendiendo", dijo de él su entrenador.

Osimhen pugna con De Vrij en el duelo dentre el Nápoles y el Inter.

Osimhen pugna con De Vrij en el duelo dentre el Nápoles y el Inter. / AFP7

"Tiene un potencial infinito. A veces se va a hacer un uno contra once porque no se da cuenta que el equipo no le sigue, pero está aprendiendo"

— Luciano Spalletti / Entrenador del Nápoles

El mismo promedio

Firmó por el Nápoles por cinco temporadas, hasta 2025. Ha cumplido dos. Una novedad, no ha pasado de una en sus clubs anteriores. En Italia va lidiando con los problemas, que no han sido pocos, pero mantiene el promedio goleador que exhibió en Bélgica (20 goles en 36 partidos), en Francia (18 en 38). Ha anotado 16 en 39 encuentros. En noviembre sufrió el terrible encontronazo con Škriniar.

El parte médico describió "fracturas múltiples astilladas en un pómulo y en la órbita ocular". La cara de Osimhen era una poema, hinchada y desfigurada, con el ojo fuera de sitio. Fue operado y le colocaron seis placas y tornillos. El cirujano que le operó le descartó para la Copa de África de este enero. Pero lo que le apartó del torneo fue el positivo por coronavirus de principios de mes. Unas molestias musculares no le impedirán jugar en el Camp Nou.