La tirolina más larga de Catalunya estará muy cerca de la nieve

El aumento de las temperaturas por el cambio climático está complicando la supervivencia de las estaciones de esquí. Las pocas lluvias y el escaso frío dificultan las grandes nevadas, que deberían cubrir la superficie de estas estaciones que hace años lucían completamente blancas por estas fechas.

El negocio del Pirineo catalán está buscando ya alternativas para poder subsistir sin los deportes de invierno en temporadas con pocas nevadas. El principal sustitutivo de la nieve natural es la artificial, pero muchos de estos enclaves ya buscan otras opciones para diversificar el sector.

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Ya se ofrecen paseos por la montaña, rutas en bicicleta o actividades de aventura para los más pequeños en algunos de estos sitios y ahora, la estación de Boí Taüll (Alta Ribagorça, Lleida), añade una nueva actividad a su catálogo: un descenso en la tirolina más larga de Catalunya, con 1,2 kilómetros.

La tirolina de Boí Taüll

El proyecto se desarrollará de la mano de Ferrocarrils de la Generalitat, propietaria de la estación, y costará 1,5 millones de euros. La tirolina será doble, contará con un dispositivo de autofrenado y podrá alcanzar los 100 kilómetros por hora. Se podrá descender solo o acompañado, y elegir la posición en la que se quiere bajar, "incluida la posición de ‘Superman’".

La nueva tirolina tendrá una primera fase -ya licitada-, con un tramo de 200 metros desde la base de la estación hasta una plataforma en el Pla de Vaques, que se inaugurará este mismo verano. La segunda fase cruzará todo el valle durante un kilómetro y terminará en el aparcamiento cerca de la carretera L-501.

Cuando esté totalmente acabada, la tirolina de Boí Taüll será la más larga de Catalunya, quitándole el primer puesto a la ubicada en Campdevànol (Ripollès, Girona), que mide 270 metros. Sin embargo, no superará a la más extensa de toda España, que se encuentra en Ordesa (Huesca) y mide casi dos kilómetros.

Así es la nueva tirolina que se ha instalado en el parque de la Pegaso de la Sagrera en Barcelona

Desestacionalizar el turismo

David Ros, director de las pistas de Boí Taüll, asegura que esta nueva actividad se añadirá a otras que ya son populares entre los turistas, como las rutas en bicicleta eléctrica o los circuitos infantiles de moto.

El proyecto está concebido para atraer a los turistas durante todo el año, y no solo en invierno para esquiar. Además, las escasas nevadas podrían seguir perjudicando al negocio puramente níveo. "La finalidad es contribuir a desestacionalizar el turismo, con una nueva actividad de ocio que podrá funcionar durante todo el año. Las estaciones de esquí deben ser estaciones de montaña", explica la alcaldesa de la Vall de Boí, Sonia Bruguera.