La crónica del Espanyol - Mallorca: Braithwaite baila en Cornellà

Después del subidón vivido en Elche con el fantástico gol de Darder en el minuto 92, el Espanyol volvió a llevarse una alegría, esta vez en casa ante su sufrida afición. El Mallorca de Javier Aguirre plantó cara a los pericos, que supieron resolver el choque con dos goles de Martin Braithwaite, el delantero que llegó gratis procedente del Barça (2-1). Es el tercer triunfo en Cornellà del bloque catalán, el segundo peor local de la Liga. Diego Martínez respira aliviado con tres puntos de oro que acercan el objetivo de la permanencia. 

El mejor

Siempre ha dicho que se encuentra más cómodo arriba que en la banda. La lesión de Joselu le ha permitido jugar en la posición que más le gusta y Braithwaite ha cumplido a la perfección pese a jugar con molestias en la rodilla en las últimas citas. Con sus dos goles de este sábado, celebrados con sus clásicos bailes, suma cuatro en las seis últimas jornadas y un total de siete en la Liga, uno más que en su mejor temporada con el Leganés. Con el Barça marcó cinco en dos años y medio. "Estoy muy contento con la victoria, es muy importante para nosotros. Queríamos darle otro triunfo a la afición. Me siento muy bien aquí", dijo el MVP del partido.

El primer tanto del danés llegó en el minuto 21 con 47 segundos, en el tramo final de los aplausos con los que los pericos recuerdan en cada partido a Dani Jarque, el excapitán fallecido en 2009. El punta aprovechó un pase de Aleix Vidal tras un error del meta Rajkovic. El segundo lo firmó con un gran tiro cruzado tras una asistencia de Melamed (m. 51). El golazo de Muriqi antes del descanso resultó insuficiente para los baleares. 

El debate

Llegaba un nuevo examen en casa y se esperaba con expectación la respuesta de los pericos en un duelo clave en la ruta hacia la permanencia. El club volvió a impulsar una promoción para incentivar la presencia de público y se vendieron más de 5.000 entradas. Al final, la asistencia fue de 21.403 espectadores, mil menos que en el anterior choque en Cornellà ante Osasuna disputado en idéntico horario (22.438). 

"La conexión con la afición ha sido muy bonita. Estoy muy orgulloso del equipo, se lo ha currado"

— Diego Martínez / Entrenador del Espanyol

La mejor entrada sigue siendo la del partido contra el Madrid (25.778). La media de este curso en el RCDE Stadium no llega a los 20.000 espectadores, lo que supone ver medio estadio vacío en la mayoría de encuentros. El próximo compromiso en casa tendrá lugar en tres semanas, el sábado 18 de marzo ante el Celta a las 18.30, un horario ideal para mejorar la estadística de asistencia.

La táctica

Después de apostar por tres centrales en Elche, un esquema motivado también por las numerosas bajas, Diego Martínez recuperó su clásica defensa de cuatro, con el regreso del Cachorro César Montes, el fichaje más caro del mercado de invierno de la Liga y nuevo jefe de la zaga perica. La gran novedad fue la suplencia de Cabrera, que empezó por primera vez en el banquillo en esta Liga. 

El central uruguayo había sido titular en 20 de los 22 anteriores partidos de Liga. Los otros dos se los perdió por sanción. Sergi Gómez le ganó este sábado la partida después de romper su increíble gafe de 30 partidos consecutivos sin ganar. Vini Souza y Darder formaron el doble pivote, con libertad de movimientos para Denis en la mediapunta. Aleix Vidal y Puado ocuparon las bandas con Braithwaite como referencia ofensiva. Joselu partió desde el banquillo una vez recuperado de sus molestias musculares. Nico Melamed fue clave como revulsivo en el segundo tiempo.

Un mal día para...

Aunque el Mallorca está completando una notable temporada, más cerca de los puestos europeos que de la zona peligrosa, Javier Aguirre acabó contrariado este sábado en su retorno a Cornellà. Su equipo, brillante en casa, sufrió la quinta derrota consecutiva fuera. “Fue un partido muy igualado, de pocos errores. Nosotros los cometimos y eso nos penalizó”, resumió el mexicano, que estuvo dos temporadas en el banquillo perico tras sustituir a Pochettino en noviembre de 2012, cuando el Espanyol iba último, y logró la salvación. 

El técnico, siempre dicharachero, no tenía muchas ganas de guasa tras la derrota. “Queríamos ganar, estuvimos bien en la primera parte, fuimos mejores con la pelota pero nos marcaron en nuestro único fallo. En la segunda, nos marcaron pronto en otro error nuestro, también hubo algo raro ahí, y después no pudimos”, agregó Aguirre, que protestó una posible falta de Darder en el segundo gol de Braithwaite. Alberola Rojas le mostró la amarilla.