La tradición es importante, la evolución, aún más

El Tribunal Constitucional está pendiente de dictar sentencia sobre si Catalunya tiene o no competencias para prohibir la tauromaquia.  Ya que, de acuerdo con el artículo 149 de la Constitución, es competencia exclusiva del Estado la defensa del Patrimonio Cultural.

No estoy en contra de dicho artículo, pero lo que no alcanzo a comprender es cómo se puede calificar de cultura una actividad que se basa en la tortura y asesinato de un animal por simple entretenimiento popular.  ¿Qué tipo de persona puede gozar al ver el sufrimiento y  enloquecimiento de un animal que se debate entre la vida y la muerte?

Los romanos adoraban las luchas a vida o muerte entre gladiadores, una tradición inhumana que por suerte desapareció con el paso del  tiempo y que ahora solo constituye un recuerdo en el mar de la  historia. ¿Os imagináis que esta tradición no hubiese desaparecido y que ahora hubiese gente defendiendo la lucha a muerte de dos personas como método de ocio popular?

La tradición es muy importante, pero lo es todavía más la evolución  y creo que en el siglo XXI la tortura animal como espectáculo no debería tener cabida alguna.