Elecciones 23-J

Turull responde a ERC: "No he ido a la cárcel por Rodalies y la financiación"

Aragonès pone precio a Sánchez: acabar con el déficit fiscal, traspaso de Rodalies y mesa de diálogo

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El secretari general de Junts, Jordi Turull, en un acte de campanya a Banyoles

El secretari general de Junts, Jordi Turull, en un acte de campanya a Banyoles / Nico Tomás / ACN

Carlota Camps

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Junts eleva el tono contra ERC, después de que el 'president' Pere Aragonès haya desvelado cuál será el precio de los republicanos a una eventual investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno. "No he ido tres años y medio a la cárcel para hacer un frente común por Rodalies y la financiación. No hay gente en el exilio para esto", ha señalado el secretario general de los posconvergentes desde Banyoles, donde el partido celebra el mitin final de las comarcas gerundenses.

Las afirmaciones de Turull llegan después de que Aragonès haya afirmado en un acto en L'Hospitalet de Llobregat que el "precio" que podrá ERC a un Gobierno del PSOE y de Sumar será "continuar con la negociación política", "acabar con el déficit fiscal" y "culminar el traspaso de Rodalies".

Aragonés, que tras las elecciones municipales pidió crear un "frente común" contra un eventual gobierno de PP y Vox, también ha afirmado que son propuestas "asumibles" para los socialistas y que estarán encima de su mesa con tal de "parar" al PP.

Más allá de estas críticas a los republicanos, la presidenta de Junts, Laura Borràs, ha disparado duramente contra los socialistas y ha vuelto a equiparar sus estrategias con Catalunya con las del PP.

"Estaríamos de acuerdo con frenar a la ultraderecha, pero al PSOE nos lo podemos creer poco, tendiendo a nada", ha asegurado Borràs, que ha acusado a los socialistas de preferir "que gobierne PP con Vox" antes que plantearse una "abstención" a una posible investidura de Alberto Nuñez Feijóo. "Es una manera extraña de frenar a la ultraderecha. De lecciones de cómo parar la ultraderecha ni una", ha zanjado.

Finalmente, el 'expresident' Carles Puigdemont ha hecho, de nuevo, un llamamiento a la movilización y contra el abstencionismo, asegurando que esto haría "feliz" al Estado. "Una de las líneas de defensa de la independencia son las urnas", ha implorado Puigdemont, asegurando que es necesario acudir a cada convocatoria electoral para enviar este mensaje "explícitamente y persistentemente".