Futuro del auto en Catalunya
Torrent viaja a China para agilizar el desembarco de Chery en Zona Franca
La reindustrialización de Nissan entra en su fase decisiva, pendiente del 'sí' de Chery
MULTIMEDIA | ¿Cómo va la reindustrialización de Zona Franca?
Gabriel Ubieto
Redactor
Periodista de economía, centrado en el mercado laboral. He crecido como redactor en El Periódico, pero antes hice prácticas en La Vanguardia y escribí durante seis meses desde Chile para Hemisfèria.cat. Ganador del premio Ramon Barnils (2015) por el reportaje "Els ultres prenen partit".
El ‘conseller’ de Empresa i Treball, Roger Torrent, ha viajado este martes a China para reunirse con una serie de empresas con las que espera estrechar lazos económicos y atraer inversiones para Catalunya. Y una de ellas es Chery, el fabricante de automóviles que se encuentra actualmente en negociaciones con el D-Hub para ensamblar sus coches eléctricos en los terrenos donde antiguamente se ubicó Nissan.
Torrent se reunirá con las empresas Shanghai Jingqingrong Garment (téxtil), Wanhua (distribuidor químico) y Chery (automóvil) y visitará las regiones de Hong Kong, Shenzen, Wuhu, Xangai y Yantai, según ha hecho pública su 'conselleria' este miércoles en un comunicado. La idea de la Generalitat es maximizar la cifra de 1.164 miliones de euros que en los últimos cinco años han llegado del país asiático, según datos de Acció.
Si bien toda inversión extranjera será bienvenida, la que está más avanzada es la de Chery. Las conversaciones entre los nuevos inquilinos de la Zona Franca y este fabricante chino están avanzadas, pero todavía no hay resolución a la vista. Varias fuentes implicadas en el proceso de reindustrialización de las fábricas niponas coinciden en que las próximas semanas son decisivas para cerrar o no un acuerdo y en ese contexto se enmarca el viaje de Torrent.
Chery quiere venir a Barcelona y hacer de esta su vía de entrada a Europa, tal como ya avanzó EL PERIÓDICO. Y el D-Hub, la nueva empresa encargada de volver a fabricar coches donde Nissan los fabricó en su día, quiere producir los coches de Chery, para así incrementar los volúmenes de actividad de sus líneas y mejorar, sustancialmente, la rentabilidad del proyecto.
La idea sería que el fabricante mande los vehículos por piezas, los ensamblen los trabajadores del D-Hub y luego Chery los venda por Europa. Un sistema con el que fintaría parte de los aranceles que le costaría traer directamente los vehículos de sus factorías en China.
No obstante, no es la primera vez que Chery se deja querer por los gobiernos catalanes para atraer sus inversiones. Ya en 2010 el entonces ‘president’, José Montilla, viajó a China para visitar las fábricas de la firma automovilística. Aunque volvió sin compromisos firmes y desde entonces el nombre del fabricante ha ido apareciendo y desapareciendo de las quinielas.
Como todos los fabricantes de automóviles, la negociación de ayudas y subvenciones para lubricar su aterrizaje es una cuestión capital. Nissan, por ejemplo, poco antes de cerrar arrancó a la Generalitat una inyección para cambiar las instalaciones de pintura y adaptarse a los nuevos criterios medioambientales de producción. No llegó a ejecutarse nunca, pero la inversión pública fue aprobada para tratar que los nipones no cerraran.
Viejos conocidos
Chery ha ido realizando distintos viajes a Barcelona para hacer prospecciones. En noviembre del 2022 su presidente, Tongyue Yin, se desplazó a la capital catalana de la mano de Foment del Treball. Durante su estadía se vio con el 'president' de la Generalitat, Pere Aragonès, según corroboran distintas fuentes consultadas. Más recientemente y a un nivel más técnico, una delegación estuvo a finales de septiembre en la planta de Zona Franca, para chequear las capacidades e idoneidad del terreno.
Los números que pretende Chery para Barcelona bailan según las fuentes consultadas. Las más optimistas sitúan sus producciones en 50.000 unidades al año, mientras otras rebajan dicha cifra a 30.000. No obstante, todavía no hay papel en firme al respecto, más allá de una declaración de intenciones.
Truncada la llegada de un gran fabricante chino para Zona Franca con la retirada, hace año y medio, de Great Wall Motors, la Generalitat vería con muy buenos ojos una relación estable y a largo plazo con Chery.
Y es que el proyecto del D-Hub y que fuera este quien se encargara de reindustrializar los antiguos terrenos de Nissan es una apuesta clara de la administración catalana. Tanto del 'conseller' Torrent, como de la actual 'consellera' de Economia, Natalia Mas, hasta hace poco directora de industria y una de las grandes valedoras del D-Hub. Que los chinos doten de altos volúmenes de actividad a la planta de Zona Franca aseguraría la viabilidad del proyecto.
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