Mercadona ha destinado más de 124 millones a la mejora de tiendas en Barcelona desde 2017

Mercadona ha cifrado en más de 124 millones de euros su inversión en "la ampliación y mejora" de tiendas en la ciudad de Barcelona desde 2017. Según un comunicado de este martes, trabaja en la "implantación de un modelo de tienda eficiente" con el que prevé reducir hasta un 40% el consumo energético respecto a una tienda tradicional. Mercadona copa en torno al 25% de la cuota de mercado de la distribución en España.

Desde 2017 ha reformado 29 establecimientos en la capital catalana y ha abierto 7 más, y a cierre de 2022 contaba con 43 supermercados y 2.690 empleados. Entre los nuevos ha habido aperturas netas (como las tiendas de la calle de Castillejos, en el Turó de la Peira y en el barrio de Sagrada Família, concretamente en la calle de Provença) o bien supermercados que reemplazan los que no se adaptaban al nuevo modelo (como los de Rambla Guipúscoa y de Can Batlló, que han sustituido los de las calles Pare Manyanet y Sant Pere Abanto respectivamente).

La compañía ha reabierto este martes la tienda de la calle de Andrade del distrito de Sant Martí, tras haber invertido 4 millones de euros en una "reforma integral" durante la que han trabajado más de 70 personas. En el conjunto de Catalunya, Mercadona cerró el año pasado con 250 tiendas, tres bloques logísticos y un almacén dedicado al servicio online, y su plantilla alcanzó los 14.615 empleados.

Reorganización de la cúpula

La cadena de Juan Roig anunció esta semana la reorganización de su órgano de administración, que pasa de 13 a 8 miembros. Agrupa las compras en dos directores, frente a los siete que tenía hasta ahora. Las operaciones de compras estaban hasta ahora repartidas entre siete directores generales y quedan reducidas a dos; Paco Espert se encargará del área de productos secos y Rafa Berrocal queda al frente de frescos y de comida preparada. Estos dos directivos llevarán desde ahora toda la relación de Mercadona con sus proveedores especialistas. Esta reorganización está en el marco de la reorganización acometida con los proveedores hace cinco años. De tener más de un centenar de empresas a las que denominaba interproveedores, con contratos estables y que también hacían sus marcas propias (Hacendado, Delipuls, etc), pasó a buscar nuevas relaciones comerciales para otorgar más flexibilidad a su política de compras. En esa transición algunas de esas empresas cuyo cliente único o principal era Mercadona, pasaron a vender también a otras cadenas de distribución. Mercadona tiene cerca de 3.000 proveedores con la condición de especialistas o 'totalers', que suelen ser los líderes en sus mercados, que ya no se encargan de categorías de productos sino de productos concretos. En momentos de alza de precios de materias primas o energéticos, la capacidad de cambiar de manera rápida de proveedor es un elemento clave para las cadenas de distribución.